Pago excesivo de cuotas y control administrativo severo, entre las denuncias de los operadores, la mañana de este sábado.
Por espacio de casi una hora, un número considerable de usuarios del servicio de transporte, que presta la empresa Autotransportes Tlaxcala, Apizaco, Huamantla S.A. de C.V. (ATAH); la mañana de este sábado padecieron una afectación importante a su movilidad.
Esto debido a que varias decenas de trabajadores de ese monopolio, poco después de las 7 de la mañana decidieron bloquear con unidades la terminal en Apizaco, y realizar un paro de actividades de las «micros» o «vitrinas» que cubren diferentes rutas.
Obligando también a que los autobuses, las Sprinter y la camionetas van, realizarán labores de ascenso y descenso en las calles Jesús Carranza y Francisco Sarabia; que corresponden al frente y la parte trasera del centro neurálgico y de operaciones de la empresa transportista.
Donde en su interior y pacíficamente se concentraron casi un centenar trabajadores del volante, quienes ante la mirada de compañeros y usuarios que varados esperaban en los andenes; el cómo en cuestión de minutos fueron atendidos por José Luis Tamayo Reyes el presidente del Consejo de Administración.
A quien -de frente- le hicieron saber su inconformidad y desacuerdo en el pago de 500 pesos de la tarjeta por cada unidad, que registro un incremento para dizque recabar beneficios para otros compañeros, también el incremento de la cuenta de un importe promedio de mil 400 pesos, entre otros reclamos.
A un costado de la sala de espera la situación se mantuvo volátil, hasta que el ex candidato a un puesto de elección popular, conminó a los inconformes a crear una comisión para dialogar el próximo lunes a las 11:00 horas en un lugar no especificó aun.
Después de intercambiar más impresiones, los paristas sin dar alguna aseveración, comenzaron a abordar unidades (micros) para retirarse de las instalaciones a toda velocidad con la supuesta intención de querer llevar a cabo algunos bloqueos; los que no se concretaron debido a que el nutrido dispositivo de seguridad por parte de los policías (encabezados por Carlos Cárdenas) habrían frustrado la intentona.
De esta forma se reactivó el servicio y se desactivó el paro de transportistas, que indudablemente afectó a las personas que buscaban viajar a diversos destinos; los que tuvieron que echar mano a opciones alternas para desplazarse.
Mismos que con maletas y bultos en mano, criticaron lo que estaba ocurriendo y hasta pidieron a las autoridades abrir la posibilidad de que más líneas de transporte operen las rutas porque hoy fueron afectadas; para evitar el padecer una afectación (como la de hoy) a su movilidad.
Por otra parte en entrevista para algunos medios, José Luis Tamayo Reyes intentando minimizar la situación aseveró que el conflicto de este día tiene su origen en temas internos, que involucró a unos cuantos y que según su versión ya está resuelto; aprovechando de paso para ofrecer una disculpa al público usuario.
Y también afirmando desconocer -de momento- las afectaciones económicas que generó la manifestación de los trabajadores que también están exigiendo mejores condiciones laborales, quienes afirmaron para ejemplificar que algunos de ellos no cuentan al menos con seguridad social. Dejando abierta la posibilidad de que podría haber una huelga: “Ese era el propósito… porqué todos estamos inconformes, sólo que alguien ‘chivateo’ y los únicos que se movieron fueron ellos».
