El próximo 8 de diciembre del presente año, los andamios bajarán el telón y el mundo podrá observar otra vez, después de cinco años de restauración, la catedral de Notre Dame. La fecha prevista, que coincide con la festividad cristiana de la Inmaculada, significará el pistoletazo de salida para que el público pueda volver a acudir a la basílica.
En cuanto a los trabajos de restauración, solamente interrumpidos durante algunas semanas durante la pandemia, han resultado titánicos.
La página web oficial que detalla el proceso de reconstrucción de la catedral, Rebuilding Notre Dame, detalló que hay cerca de 250 empresas y talleres de arte en toda Francia encargados del resurgimiento del edificio. Entre ellos se encuentran carpinteros, canteros, escultores, doradores, vidrieros e incluso organeros, que están restaurando los 8.000 tubos y 115 registros del gran órgano de la catedral, el más grande de Francia.
Según el presidente del organismo público Rebâtir Notre-Dame de París, Philippe Jost, en declaraciones a BFMTV, “la mayor parte del trabajo consistió en reconstruir las bóvedas derrumbadas y reconstruir los techos enteramente consumidos por el fuego y la aguja superior, cuyo colapso fue una de las imágenes más dramáticas del incendio”.
En el interior del templo, los expertos aprovecharon para realizar la limpieza de paredes, vidrieras, bóvedas y decoraciones. Esa etapa está casi concluida y ha permitido devolver a la catedral una luminosidad desconocida en la memoria reciente. “Es verdaderamente maravilloso, todos estos colores habían desaparecido completamente. Los estoy descubriendo ahora”, dijo a AFP el vicerrector de Notre Dame, Guillaume Normand.
Sobre las voces críticas que señalan que la apertura no se podrá producir en el presente año, Jost aseguró que “tenemos confianza, estamos en el plazo previsto y en esta fase, la mayor parte del trabajo ya está detrás de nosotros”.
También deja claro que el proceso de remodelación y, en muchos casos, de reconstrucción, no finalizará después de la inauguración. De los 840 millones de euros recaudados aún quedarán 140 millones de euros por utilizar e irán destinados a las zonas exteriores del edificio.
Por su parte, los alrededores de la catedral también estarán sujetos a una metamorfosis de aquí a 2028 y con la colaboración del Ayuntamiento de París.
Un edificio milenario
Notre Dame es símbolo de la cristiandad, Patrimonio Mundial de la Unesco y una obra maestra del arte gótico que ha atestiguado los últimos 900 años de París. Presente en revoluciones, inestabilidad política, profanada, restaurada y remodelada en numerosas ocasiones, el incendio del 15 de abril de 2019 fue solo el último trágico episodio de este edificio.
El incendio se originó de forma accidental en el tejado del edificio, donde se estaban haciendo remodelaciones y el incidente ocasionó daños considerables. La aguja de la catedral y el tejado se derrumbaron y el espacio interior quedó dañado severamente.
El incendio de Notre Dame de París provocó un movimiento de solidaridad en todo el mundo, siendo las donaciones masivas el impulso principal para la completa reconstrucción del edificio, que verá la luz en diciembre.
Con información de France 24.
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