En el cuadrante norponiente del Centro hay 3 mil 500 comercios instalados, pero de estos 2 mil 500 cerraron por la pandemia por ordenes de las autoridades.

Para la Cámara Nacional de Comercio (CANACO), de mantenerse el cierre en el Centro Histórico, diez mil familias poblanas perderán su sustento por lo que se solicitó al Ayuntamiento capitalino revertir la medida aplicando restricciones sanitarias.

El presidente del organismo, Marco Antonio Prosperi opinó que, ante el avance de la epidemia, se deben establecer políticas publicas que «nos ayuden a convivir con el virus» para aplicar una apertura paulatina, no solo en el primer cuadro de la capital, sino en otros segmentos esenciales para la vida cotidiana y la economía.

Desgloso que el problema radica en que, solo en el cuadrante norponiente del Centro, hay 3 mil 500 comercios instalados, pero de estos 2 mil 500 cerraron por la pandemia por ordenes de las autoridades, lo que deriva en que 3 empleados y el propietario ya no tengan ingresos para sobrevivir.

También indicó que los mil que siguen abiertos, sufren diversos problemas de abasto o de operación, debido a que no circulan vehículos en 60 manzanas. En el caso de las farmacias, se contabilizaron 78 con problemas de abasto.

Además hay 229 establecimientos que venden alimentos no preparados y abarrotes que, pese a ser esenciales están aislados y no pueden cumplir con su metas: surtir a tenderos o comercios que operan en otras partes de la Ciudad.

TEMEN SAQUEOS

El presidente de comerciantes del Centro Histórico, José Juan Ayala dijo que el otro problema agregado al cierre de calles a la circulación vial es la delincuencia y al temor fundado de que, se registren saqueos porque ahora se vacía la zona desde las 17 horas.

Además los empleados que aún van a laborar deben caminar y son presa fácil de los asaltantes. Ahora el delito que va a la baja es la de farderos y robos de autopartes, ejemplificó.

Ante este panorama se sumó a la petición de Prosperi para reabrir el transito en el Centro Histórico, con el compromiso de cuidar la parte sanitaria completamente.

Finalmente pidió a la alcaldesa que, por las tardes y las noches, se refuerce la seguridad donde se concentra la mayor cantidad de comercios cerrados por no ser esenciales para evitar que haya crsitalazos o cortinazos.

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