La contingencia sanitaria y la incertidumbre jurídica, han golpeado las inversiones, hay bajos niveles de confianza empresarial en ningún estado es mayor a 20 puntos.
Por la contingencia sanitaria de COVID19 que frenó las actividades empresariales esenciales y no esenciales, las expectativas de inversión del empresariado mexicano bajaron en los estados de Puebla y Tlaxcala, hasta siete y tres puntos porcentuales, respectivamente, de marzo a junio del año 2020.
En el País, el indicador denominado Ánimo para Invertir fue del 37 por ciento de los socios de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), lo que significa una disminución de tres puntos porcentuales con respecto a los resultados del mes de marzo.
Según los resultados de #DataCoparmex en Tlaxcala el 35 por ciento de las y los empresarios consideraron que ahora es buen momento para invertir al mes de junio, sin embargo ello refleja una disminución de tres puntos porcentuales tomando en consideración que el 38 por ciento estaban dispuestos a invertir en el mes de marzo cuando inició la emergencia sanitaria.
Puebla, registró un 32 por ciento en Ánimo para Invertir en estos momentos al mes de junio, pero ese rango también refleja una disminución de hasta siete puntos, ya que en el mes de marzo manejaba un 39 por ciento de optimismo.
Además, el indicador Confianza Empresarial tampoco registra un buen panorama, Puebla y Tlaxcala al mes de junio tuvieron un índice del 19 por ciento, lo que significa un valor poco optimista por parte de los empresarios para que emprendan inversiones en ambas entidades, en ese rango se colocan un total de 12 entidades. El valor nacional de confianza empresarial es de 18 por ciento.
Los valores por encima de 50 por ciento se consideran optimistas, pero después de la emergencia sanitaria por el COVID19, ningún estado llega ni a los 20 puntos de confianza empresarial.
En el caso particular de Tlaxcala, el índice de confianza empresarial que mide la confianza de los empresarios en la economía para emprender negocios, registró una caída a partir del primer trimestre del 2020.
En marzo, cuando inició la emergencia sanitaria, la entidad registraba optimismo ya que el 31 por ciento de los socios Coparmex estaban dispuesto a invertir, es decir tres de cada 10, pero para el mes de junio el nivel fue de 19 por ciento, lo que significa un decrecimiento de 11 puntos.
Con respecto a Puebla, el ánimo para invertir era alto del 31 por ciento al mes de marzo, pero al pasar de los meses y con el avance de la pandemia con las restricciones en las actividades económicas ese rango bajó a 19 por ciento al mes de junio, lo que significa una reducción de 12 puntos.
