Se trata de equipos que han estado en México desde hace varios años, aunque su uso se había limitado a la investigación. 

México forma parte de los siete países que fabrican ultracongeladores a nivel mundial y que distribuyen dicha tecnología para almacenar la vacuna contra covid-19 desarrollada por Pfizer, la cual requiere estar a una temperatura de menos 70 grados centígrados.

Se trata de equipos que han estado en México desde hace varios años, aunque su uso se había limitado a la investigación, de acuerdo con Isaac del Carillo, gerente general de Delca Científica.

“El uso que se le ha dado a los ultracongeladores en México ha sido para almacenar tejidos, cordón umbilical, células de investigación de diversas patologías y que requieren mantener su estructura intacta».

“También se utiliza para almacenar plasma y ahora la nueva vacuna contra covid-19”, dijo tras recordar que en Tijuana, Baja California, se ubica la planta donde ingenieros y técnicos mexicanos fabrican este tipo de ultracongeladores con tecnología japonesa.

En este momento, Suecia, China, Brasil, India, Italia, Estados Unidos y México son los únicos que fabrican éstos equipos.

“Tenemos 12 años de estar instalados en México. En ese lapso hemos vendido ultracongeladores a la Universidad Nacional Autónoma de México, la cual, tiene alrededor de 10; al Politécnico Nacional, a los institutos nacionales de, Nutrición y Cardiología y por supuesto, a instituciones privadas”.

La empresa especializada también en la Red de Frío de vacunas que requieren de 2 a 8 grados de temperatura, ha vendido más de 20 equipos, uno de los cuales viajará a Nuevo León y la mayoría a Estados Unidos donde se están preparando desde hace meses en recibir la vacuna contra la cepa pandémica.

“Un ultracongelador es un gabinete que está aislado en sus paredes y en la parte de abajo. Cuenta con dos compresores y lo importante es que alcanza temperaturas de menos 70, 90 y hasta 150 grados centígrados”, explicó en entrevista con MILENIO.

El ultracongelador mediano mide más de 2 metros de largo. Cuenta con paredes aislantes de 12 centímetros, sus estantes son de acero inoxidable. En menos de tres horas ya está a la temperatura indicada.

“Este, por ejemplo, tiene capacidad para almacenar 187 mil 200 dosis de Pfizer, según las especificaciones de la compañía, y mantenerlas durante seis meses”.
Los equipos, aclaró, siempre se han usados con fines de investigación y esta será la primera vez que se utilice para una vacuna. 

“Ningún país estaba preparado, obviamente. Normalmente la vacunación requiere de una red de frío de 2 a 8 grados de temperatura; sin embargo, la nueva tecnología de la vacuna requiere de menos 70 grados y dependerá de cada gobierno la decisión de adquisición”, dijo.

En México este tipo de equipo requiere estar ubicado en una zona ventilada. Se conecta a la luz eléctrica, a 115 y 220 voltios.

“Se recomienda se conecte a una planta de emergencia en caso de que se vaya la luz y, en caso de no tenerla, tiene un sistema de respaldo de CO2 para poder conservar la temperatura por tres horas y trasladar las dosis sin alteración”, dijo.

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