Consideraron que el puente a desnivel que pretenden realizar en la zona, resulta innecesario ya que ello terminaría con el comercio en la zona

Vecinos y comerciantes asentados a orillas de la carretera federal Vía Corta Santa AnaPuebla, se manifestaron pacíficamente en contra del proyecto de construcción de un puente elevado en la zona.

Los inconformes denunciaron falta de claridad en el mismo y temen que se generen afectaciones y pérdidas durante el proceso de construcción.

Y es que en este tramo carretero, existen varios comercios de distintos giros asentados a pie de carretera, mismos que temen verse afectados durante varios meses, ya que podrían quedarse encerrados durante el desarrollo de las obras, lo cual afectaría de manera considerable sus ingresos que de por sí por la pandemia se han visto afectados.

Y es que, los pobladores, denunciaron que la Secretaría de Obras Públicas, Desarrollo Urbano y Vivienda (Secoduvi), no les han dado a conocer el proyecto, ni mucho menos la planeación del desarrollo de las obras, además de que no han sido atendidos por el titular de la dependencia estatal.



Al respecto, el regidor del ayuntamiento de Apetatitlán, David Robles Figueroa, quien también es uno de los comerciantes de la zona inconformes, consideró que el puente a desnivel que pretenden realizar en la zona, resulta innecesario ya que ello terminaría el comercio en la zona, donde existen alrededor de unos 100 negocios.

Señaló que en Chiautempan, resulta más necesario el puente debido a la carga vehicular que se genera en este tramo, mientras que en el tramo donde se pretende iniciar este día con una inversión de 180 millones de pesos, el tráfico es fluido y es por ello que consideró que resulta improcedente.

Además, reclamaron que donde inicia el proyecto, en los límites con la localidad de Ixtulco, del municipio de Tlaxcala, existe un problema añejo debido a que se acumula el agua en temporada de lluvias, ya que en la zona existía una laguna, lo que podría generar la inundación de este tramo carretero, debido a las condiciones del terreno.

Asimismo, los vecinos reclamaron que para el inicio de la obra, derribaron varios árboles de varios años de antigüedad y que eran hogar de algunas aves que se asentaron durante años en la zona y donde tienen sus nidos, lo cual podría obligar a su muerte o migración, cuando por años han sido respetados por la gente de la zona.

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