Para América Latina y el Caribe en conjunto, el Banco Mundial espera que la actividad económica regional crezca 3.7 por ciento en 2021.
El Banco Mundial informó que la contracción económica de México en 2020, ocasionada por el coronavirus, fue de 9 por ciento, y no de 10 por ciento como calculó en octubre pasado, mientras que para este 2021 mantuvo su estimación de un avance de 3.7 por ciento.
Para 2022 ajustó sus previsiones de crecimiento económico, de 2.8 a 2.6 por ciento. De acuerdo con el documento Perspectivas Económicas Mundiales, la proyección de una recuperación en México se basa principalmente en una mejora de las exportaciones, a medida que repunta la economía estadounidense y la incertidumbre comercial se disipa tras la entrada en vigor del Tratado entre Estados Unidos, México y Canadá (T-MEC) a mediados de 2020.
AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE
Para América Latina y el Caribe en conjunto, el Banco Mundial espera que la actividad económica regional crezca 3.7 por ciento en 2021, a medida que se flexibilicen las iniciativas para mitigar la pandemia, se distribuyan vacunas, se estabilicen los precios de los principales productos básicos y mejoren las condiciones externas. No obstante, aclaró, el repunte será muy débil y se produce después de una década de crecimiento lento.
En un escenario negativo, en el que se retrase la distribución de las vacunas, con efectos económicos secundarios, el crecimiento podría ser aún menor, de 1.9 por ciento. El organismo internacional explicó que la región de América Latina y el Caribe se ha visto gravemente afectada por la pandemia del covid-19, tanto desde el punto de vista sanitario como desde una perspectiva económica, pues cinco de las diez economías de mercados emergentes y en desarrollo con la mayor tasa de fallecimientos per cápita a causa de dicha enfermedad están situados en la región.
Indicó que se calcula que la economía regional se contrajo 6.9 por ciento el año pasado, debido a que los hogares y las empresas presentaron una conducta de aversión al riesgo y las medidas para controlar la pandemia limitaron las actividades en el sector formal.
Además, el empleo formal, las horas trabajadas y los ingresos laborales han disminuido marcadamente, al tiempo que las mujeres y los jóvenes, que tienen un alto nivel de participación en los sectores más perturbados por la pandemia, como los hoteles, los restaurantes y los servicios personales, se han visto afectados de manera desproporcionada por la pérdida de empleos, al igual que los hogares de bajos ingresos.
A esto se suma, abundó, que la disminución de los ingresos ha contribuido a la inseguridad alimentaria, que se ha visto exacerbada por la inflación de precios de los alimentos en algunos países.
ECONOMÍA MUNDIAL
Para la economía global, el Banco Mundial prevé una recuperación de 4 por ciento en 2021, suponiendo que la distribución inicial de las vacunas contra el covid -19 se amplíe a lo largo del año; sin embargo, es probable que la recuperación sea moderada, a menos que los encargados de la formulación de políticas actúen con decisión para controlar la pandemia y apliquen reformas que aumenten “Si bien la economía mundial parece haber entrado en una recuperación moderada, los encargados de la formulación de políticas se enfrentan a desafíos enormes, en materia de salud pública, gestión de la deuda, políticas presupuestarias, banca central y reformas estructurales, al tratar de asegurar que esta recuperación mundial, aún frágil, cobre impulso y siente las bases de un crecimiento robusto”, afirmó el presidente del Grupo Banco Mundial, David Malpass.
“Para superar los impactos de la pandemia y contrarrestar los factores adversos que afectan las inversiones, es necesario dar un gran impulso a la mejora del entorno empresarial, aumentar la flexibilidad del mercado laboral y de productos, y reforzar la transparencia y la gobernanza”, sostuvo.