El papa ha destacado en numerosas ocasiones en su pontificado la importancia de atender a los mayores
El papa Francisco anunció hoy que la Iglesia católica celebrará el cuarto domingo de julio de cada año la Jornada Mundial de los Abuelos y de los Mayores.
“Es importante que los abuelos estén con los nietos y los nietos con los abuelos porque los abuelos con los nietos sueñan y tendrán ilusión, y los jóvenes, cogiendo la fuerza los abuelos, podrán ir hacia delante”, dijo Francisco este domingo, tras el rezo del Ángelus en la biblioteca del palacio apostólico del Vaticano. ”La vejez es un don”, aseguró.
El Dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida informó en un comunicado de que, con motivo de la primera Jornada Mundial de este año “el papa Francisco presidirá la misa vespertina del domingo 25 de julio, respetando la situación sanitaria, en la basílica de San Pedro”.
A medida que se acerque la Jornada, este dicasterio anunciará las iniciativas adicionales que la acompañarán, se lee en la nota.
El papa ha destacado en numerosas ocasiones en su pontificado la importancia de atender a los mayores y el pasado julio animó a los jóvenes a preocuparse y a atender a sus abuelos durante la pandemia, con llamadas constantes en el caso de que no pudieran realizarles una visita para evitar contagios de coronavirus.
La nulidad matrimonial
Francisco, además, insistió hoy en que el proceso breve para conseguir la nulidad matrimonial puede ser gratuito y que existen algunas resistencias a ello por cuestiones económicas, durante su discurso con ocasión de la inauguración del año judicial del Tribunal de la Rota.
“A vuestro Tribunal, así como a los demás tribunales de la Iglesia, se pide que se hagan más accesibles y ágiles, posiblemente completamente gratuitos, los procedimientos de reconocimiento de casos de nulidad”, recordó Francisco en su discurso.
Y para ello utilizó la metáfora “por la plata baila el mono”, criticando a aquellos notarios y vicarios judiciales que se resistieron a su reforma de los procesos matrimoniales -introduciendo ya hace años la gratuidad para los fieles que no tuvieran dinero- y que devolvían la practica al obispo y se negaban a realizar el proceso breve sólo por motivos económicos.
El papa Francisco introdujo en 2015 la reforma sobre la nulidad matrimonial, que ponía fin a un procedimiento de hace 300 años, con la introducción de un “proceso breve” y “gratuito” para poder conseguirla.
Francisco pidió hoy permiso a los jueces y empleados del Tribunal de la Rota para poder pronunciar su discurso sentado y no de pie por sus problemas de ciática. “Sabéis que la ciática es un huésped molesto. Les pido perdón y hablaré sentado”, dijo.
Por otra parte, Francisco pidió que los procesos de nulidad también se preocupen “por los niños, como víctimas inocentes de tantas situaciones de ruptura, divorcio o nuevas uniones civiles”, además de a las personas cuyo matrimonio ha sido reconocido como nulo.
Al respecto, el papa quiso que se reflexione sobre dar la comunión a los separados y vueltos a casar. “¿Cómo explicarles a los niños que, por ejemplo, su madre, abandonada por su padre y a menudo reacia a establecer otro vínculo matrimonio, recibe con la Comunión dominical, mientras que el padre, conviviendo o esperando la declaración de nulidad del matrimonio, no puede participar en la Eucaristía?”, planteó.
Ante ello, explicó que en la exhortación apostólica Amoris laetitia, donde se abordó el tema, se dieron indicaciones claras “para que nadie, especialmente los más pequeños y los que sufren, se quede solo o tratado como un medio de chantaje entre padres divididos”.