En el año 2016 mujeres entregaron a diputados y al gobernador una agenda para generar cambios estructurales que fue atendida.
Organizaciones de la sociedad civil, colectivas, feministas, académicas, activista y mujeres de Tlaxcala, lamentaron que las y los integrantes de la LXIII Legislatura local así como el gobernador Marco Antonio Mena Rodríguez dejen cuentas pendientes con las mujeres tlaxcaltecas en materia de paridad, contra la violencia de género, de acceso a la justicia, y despenalización del aborto.
Recordaron que a finales del año 2016 e inicio del 2017 varias organizaciones conformadas a partir del Colectivo Feminista de Tlaxcala entregaron una agenda de incidencia a los representantes de los Poderes Legislativo y Ejecutivo para proponer cambios estructurales en beneficio de todas las mujeres y “vemos que al paso del tiempo poco o nada de lo propuesto se ha logrado debido a la nula importancia que este gobierno les ha dado a las mujeres”.
En ese sentido, señalaron que entre los grandes pendientes que dejarán las y los diputados locales así como el gobernador ante la conclusión de sus mandatos, están: la creación de refugios, casas de acogida y casas de medio camino para atender a mujeres que viven violencia de género y trata de personas; la creación de una fiscalía especializada en el delito de feminicidio; formular e implementar una política pública con perspectiva de género y medidas efectivas en favor de mujeres periodistas y comunicadoras en situación de riesgo.
Así como la creación de un Centro de Estudios para el avance de las mujeres; garantizar, respetar, proteger y promover los derechos de las mujeres diversas por su orientación e identidad simbólica: lesbianas, bisexualas, mujeres trans e intersexualas; y por parte del mandatario local el envío al Congreso de una propuesta para despenalizar el aborto hasta las 12 semanas de gestación en el Estado de Tlaxcala.
“Sabemos que estos pendientes se quedarán para quien preceda en el poder durante seis años”, en ese sentido –advirtieron que- “estaremos vigilantes y en la exigencia de que se cumpla con una agenda con perspectiva de género y no solo se quede en simulaciones y respuestas vacías que durante el gobierno de Marco Mena vivimos”.
Sentenciaron que las exigencias “siguen en pie”, la pandemia ha agudizado las desigualdades sociales y de género, “los problemas que no se miraban o poco se reconocían como el trabajo doméstico no remunerado y de cuidados, hoy son un asunto público y necesario de tratar; las diversas violencias cada día aumentan y el acceso a la justicia no sirve, no existe en un Estado feminicida, proxeneta y violentador”.
Incluso señalaron que el tema de la salud la salud sexual y reproductiva, ha quedado en último lugar y con ello se observa el aumento de embarazos adolescentes, no planeados, abortos inducidos y problemas obstétricos que no encuentran opciones para su atención.