Anaya dijo que estaría fuera durante una temporada, ya que el Presidente Andrés López Obrador lo quiere «fregar a la mala».
La Fiscalía acusó al panista Ricardo Anaya de recibir sobornos del ex director de Pemex en el sexenio de Enrique Peña, Emilio Lozoya, para aprobar la reforma energética.
Anaya, quien ha manifestado su interés en competir por la Presidencia en 2024, aseguró el sábado pasado que vendría una persecución política.
Un juez federal del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte citó al ex candidato presidencial panista a una audiencia inicial para imputarlo por los delitos de lavado de dinero, cohecho y asociación delictuosa.
Anaya fue citado para el próximo jueves a las 10:00 horas para la audiencia, según confirmaron a Grupo REFORMA fuentes del Poder Judicial de la Federación.
Los delitos contra Anaya son los mismos por los que fue imputado y procesado el ex senador panista Jorge Luis Lavalle, detenido en abril pasado y preso actualmente en el Reclusorio Norte.
Además de Anaya y Lavalle, también están implicados los ex senadores y actuales Gobernadores de Querétaro, Francisco Domínguez y de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca.
También son acusados los ex legisladores Ernesto Cordero y Salvador Vega Casillas, así como Osiris Hernández, ex secretario particular de Anaya.
Una pieza clave en las acusaciones es Rafael Caraveo, ex secretario particular de Jorge Luis Lavalle, quien se convirtió en testigo protegido de la FGR y ha confirmado los sobornos del ex director de Pemex a los ex senadores panistas y a Ricardo Anaya.
Si bien ninguno de los ilícitos merece la prisión preventiva de oficio, la FGR puede solicitar la prisión preventiva justificada, en caso de considerar que Anaya tenga los recursos o los antecedentes migratorios que hagan suponer que puede darse a la fuga, tal y como lo planteó con Lavalle, hoy privado de su libertad.
Aunque la Fiscalía sostiene que Lozoya entregó 97 millones 190 mil pesos a los legisladores de Oposición para aprobar la reforma energética, los testimonios del ex director de Pemex y de su chofer Miguel Pérez Esquivel señalan que, en el caso específico de Anaya, la entrega fue de 6 millones 800 mil pesos y se habría llevado a cabo en el estacionamiento de la Cámara de Diputados.
Desde el primer momento, Anaya rechazó la imputación e incluso presentó una demanda por daño moral, ya que dijo que en agosto de 2014, cuando supuestamente le pagaron el soborno en el recinto legislativo, él ya no era diputado.
En un video que difundió el pasado sábado, el panista manifestó que la FGR permitió que los testigos que le imputan corrigieran este error y modificaron la imputación, para proceder penalmente en su contra.
En su mensaje, Anaya dijo que estaría fuera durante una temporada, ya que el Presidente Andrés López Obrador lo quiere «fregar a la mala» y meterlo a la cárcel para que no sea candidato en el 2024.
La imputación tiene como punto de partida la denuncia que Lozoya presentó el 11 de agosto del 2020 ante la Fiscalía, y que dio lugar al inicio de la carpeta de investigación FED/SEIDF/CGICDMX/865/2020.
López Obrador negó quererme encarcelar, pero resulta que me acaba de llegar el citatorio para una audiencia en el reclusorio norte. Los delitos que me imputan “solo” suman 30 años de prisión. ¡Menos mal que su fuerte no es la venganza! Vamos para adelante, hasta donde tope. pic.twitter.com/VoIVueuQNE
— RicardoAnayaC (@RicardoAnayaC) August 23, 2021