El estudio fue dado a conocer por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), a través de la plataforma “Calidad del Agua en las Escuelas”.
Heces fecales humanas y de animales, arsénico, manganeso, plomo, sulfatos, nitratos y otros parámetros químicos que dan dureza total y turbiedad pueden encontrarse en el agua que la empresa Concesiones Integrales SA de CV distribuye a escuelas de nivel básico y medio superior en la Ciudad de Puebla, lo cual viola la norma mexicana para uso y consumo humano.
El estudio fue dado a conocer por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), a través de la plataforma “Calidad del Agua en las Escuelas” que fue elaborada por la Red de Acción por el Agua FANMex, Cántaro Azul y el Inventario Nacional de Calidad de Agua (Inca) 2020.
La información contenida en este documento público corresponde al dictamen de los resultados de pruebas de calidad de agua, con base en la NOM-127-SSA-1994 que emitió el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) para un programa del Instituto Nacional de Infraestructura Física Educativa (Inifed), en el cual solicitó conocer los parámetros de contaminación que existían en el agua entubada suministrada a las escuelas.
Incluso, alertó que el recurso hídrico que llega a las primarias, secundarias y preparatorias de la ciudad de Puebla reportan altas concentraciones de dureza total que podrían generar enfermedades del corazón, renales, gastrointestinales, fragilidad ósea y manchas en los dientes, así como lesiones en la piel, trastornos circulatorios, daño neuronal y hasta cáncer.
La responsabilidad actual de proveer el agua para beber y sistemas de saneamiento, recae de manera directa en los gobiernos municipales que tienen que determinar quién y cómo se llevará el agua y el saneamiento a la población de su demarcación, tanto en hogares como en escuelas, hospitales y otros espacios públicos.
Sin embargo, en el caso de Puebla el servicio de agua, drenaje y saneamiento fue privatizado desde 2014 a la empresa Concesiones Integrales SA de CV, responsable directa de garantizar que el recurso hídrico que se distribuye tenga la calidad adecuada, para ser potabilizada y cumplir con la norma de uso y consumo humano.
La NOM-127-SSA-1994 (modificada en 2000) establece las medidas de referencia y los parámetros que deben considerarse para tener agua de calidad para uso y consumo humano. Es decir, de cumplirse esta normativa, el agua que llega a las escuelas podría beberse.
De acuerdo con el estudio, los contaminantes detectados en las escuelas tienen dos orígenes, el primero es hidrogeológico, es decir, contienen concentraciones elevadas de elementos presentes de manera natural en el subsuelo (por ejemplo: arsénico, flúor, manganeso, entre otros) por la forma excesiva en la que se extrae el agua subterránea y el sobre concesionamiento.
El otro tipo de contaminantes es de origen antropogénico, resultado de la falta de tratamiento de aguas residuales (domésticas) por parte de las autoridades municipales y en este caso la concesionaria; aunado a la falta de regulación y monitoreo de aguas vertidas (industriales y agrícolas) por parte de las autoridades municipales, estatales y federales.
Confirma CNDH que plantas residuales están inoperantes
Sobre el tema, el vocero de los despedidos del Sistema Operador de Agua Potable y Alcantarillado (SOAPAP), Manuel Bravo Bruno, dijo que el estudio que da a conocer la CNDH reafirma la denuncia permanente que más de la mitad de las 29 plantas de tratamiento de aguas residuales que hay en el estado se encuentran inoperantes.
En entrevista con La Jornada de Oriente, acusó que confirma la opacidad y complicidad de los tres niveles de gobierno, así como de los poderes del estado, para beneficiar a la empresa Concesiones Integrales SA de CV que opera siete plantas en la capital.
“Están cometiendo un crimen a la salud pública, los niños pueden resultar con intoxicaciones y enfermedades graves como cáncer, si están expuestos tanto tiempo a estas aguas contaminadas, como los que estudian en el BINE o Cenhch, donde cursan hasta 15 años de estudio, desde el kínder hasta la preparatoria”, argumentó.
El especialista en temas de agua dijo que “los intereses de particulares de la empresa Concesiones Integrales están por encima del discurso oficial”, pues arguyó que han pasado varias administraciones y nadie puede ponerle un freno a la compañía.
“No solo hay pruebas de daño al erario, por parte de la concesionaria, ahora hay pruebas de daños a la salud y al medio ambiente”, señaló.
En ese sentido, pidió a los gobiernos de la “cuarta transformación” que se finquen responsabilidades legales contra la empresa.
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