Suman periodos de recuperación después del cierre temporal de las actividades consideradas no esenciales durante las primeras olas de la pandemia.
Los ingresos de hoteles, restaurantes y sitios de preparación de alimentos y bebidas en Puebla y Tlaxcala crecieron 29 y 5.6 por ciento en septiembre de 2021 respecto a agosto, y suman periodos de recuperación después del cierre temporal de las actividades consideradas no esenciales durante las primeras olas de la pandemia.
Los Indicadores del Sector Servicios que da a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), refieren que los ingresos de los servicios privados no financieros para los sectores 72 y 51 -que corresponde a servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas, así como el sector de la información y medios masivos- crecieron 29 y 32.9 por ciento en Puebla.
Este crecimiento influyó para que el personal ocupado en el primer sector de servicios creciera 10 por ciento aunque, a pesar del aumento de los ingresos, disminuyó 4 por ciento el personal ocupado en el sector de la información en Puebla durante septiembre.
La información apuntó a un ascenso de los ingresos en estos dos sectores, aunque el Inegi no da a conocer otros como servicios de salud, culturales, de entretenimiento o sanitarios. En Tlaxcala los ingresos en sectores hoteleros, restauranteros, de bebidas y de la comunicación fue de 5.4 y 0.4 por ciento, respectivamente.
Esta recuperación sirvió para que creciera al menos 0.4 por ciento el personal ocupado en los servicios de alojamientos y preparación de alimentos y bebidas, aunque también se reportó una caída de 4.2 por ciento del personal ocupado en el sector de la información en medios masivos.
El informe refiere que esta disminución se debió a la limitación de la subcontratación o outsourcing de la reforma laboral, por lo que sus ingresos reales se encuentran incluso debajo de los años prepandemia.
La medición a nivel nacional de la Encuesta Mensual de Servicios de 102 actividades económicas, indica sobre una disminución de 0.1 por ciento de los ingresos por el suministro de bienes y servicios privados no financieros, de -2.7 por ciento del personal y -0.8 por ciento de las remuneraciones medias reales.