El objetivo es hacer del arte, un generador de paz y de vínculos entre personas sin importar su sexo, edad, orientación sexual, identidad de género, raza.
Este 15 de abril en todo el mundo no sólo se celebra el nacimiento de uno de los más grandes artistas en la historia de la humanidad, Leonardo Da Vinci, sino que precisamente como un homenaje a éste se conmemora el Día Mundial del Arte, pero ¿sabías que para que ello sucediera fue gracias a México y Turquía?
Fue el 15 de marzo de 2019 cuando las dos naciones solicitaron incluir en la 206ª reunión del Consejo Ejecutivo la iniciativa para que el mundo celebrara al arte en 2020 con el objetivo de “reforzar los vínculos entre las creaciones artísticas y la sociedad, poner de relieve la contribución de las artes para lograr un mundo más desarrollado, libre y pacífico”.
Pero no sólo esto, sino que de acuerdo con la iniciativa, debido a que la cultura es un herramienta transversal para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030, el Día Mundial del Arte tiene el objetivo de que el arte tenga un enfoque transversal “entre los sectores y programas de la Unesco”.
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De acuerdo con la Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, esta fecha es importante debido al potencial que mediante “las industrias creativas y las políticas en la materia” pueden ser generadoras de desarrollo e inclusión social.
Por lo anterior, en México y en el resto del mundo se llevan a cabo una innumerable cantidad de actividades para mostrar la diversidad de expresiones artísticas que existen, así como para impulsarlas debido a que con ellas se manifiestan aprehensiones sobre el mundo, los sentimientos, las emociones, los pensamientos.
Cabe mencionar que uno de los puntos importantes que han resaltado el gobierno de México, así como Comisión Nacional de Derechos Humanos y la misma Unesco es el impulso del arte como generador de paz y de vínculos entre personas sin importar su sexo, edad, orientación sexual, identidad de género, raza.
Este día nos obliga a reflexionar sobre el futuro del campo cultural en medio de una emergencia mundial. El diálogo y la escucha serán fundamentales para imaginar nuevos horizontes de forma colectiva, diversa e incluyente. Con solidaridad y generosidad saldremos adelante”, sostuvo en 2020 la secretaria de Cultura, Alejandra Frausto.
Apoyo al arte para vivir en paz
La presidenta de la Fundación Callia (“hermoso”, en griego), Carmen Reviriego, narró en 2019 a Excélsior cómo una mujer, de apariencia humilde, estaba frente a una de las obras que se exponían en el Museo Nacional de San Carlos, momento que se le quedó grabado en la memoria, ejemplo de que “la gente va a los museos a reafirmar su cultura, a sentir, a emocionarse”, por tanto, el impulso del arte en México debe ser primordial y para ello es necesaria la participación de la ciudadanía y el reconocimiento de los mecenas.
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No hay valores más humanos que la emoción, los sentimientos, la empatía, la compasión, por eso hay que apoyar el arte: para vivir en paz con nosotros mismos y los demás”, dijo.
Comentó que parte de su trabajo consiste en transmitir a la sociedad que cualquiera puede ser partícipe en el impulso del arte y la cultura y convertirse en filántropo, en un “héroe”, “para que así haya más riqueza artística y para que los acervos sean más importantes”.
Ejemplo de esto es que cualquier persona que lo desee puede convertirse en “Amigo Munal” al obtener una membresía para apoyar al museo y las cuales van desde los 300 hasta los 50 mil pesos anuales, fondos que este programa se encarga de que sean destinados a la restauración de obras, a proyectos expositivos, así como para programas culturales del museo a lo largo del año.
