Microbuses, vagonetas y autobuses cobrarán tarifa mínima de 6 pesos y máxima de 8; habrá operativos para garantizar que unidades estén en condiciones óptimas
Este miércoles 15 de junio el precio del pasaje en microbuses, vagonetas y autobuses de transporte público subirá un peso, por lo que los conductores estarán autorizados a cobrar en función del nuevo ajuste a la tarifa.
A petición de los choferes capitalinos y con la aprobación de las autoridades de la Ciudad de México, el precio por viaje en microbuses y vagonetas será de entre 6 y 7.50 pesos; el pasaje en autobuses de ruta será de entre 7 y 7.50, y el costo por persona en autobuses de corredor será de 8 pesos.
En ocasión del aumento a la tarifa, personal del Instituto de Verificación Administrativa y de las secretarías de Movilidad, Seguridad Ciudadana y Gobierno de la Ciudad de México realizarán operativos en el transporte público concesionado para verificar que los conductores cumplen con los requisitos de mejora en el servicio.
¿En qué consisten los operativos en el transporte público?
Los conductores deberán garantizar que durante su jornada de trabajo portan el uniforme solicitado por la autoridades (pantalón negro y camisa blanca), que no viajan con acompañantes al interior de la unidad, y que cuentan con licencia vigente tipo “C” y póliza de seguro.
Las unidades de transporte público no deben tener los vidrios polarizados y deben cumplir con la cromática de rótulos que facilita su identificación. Luces, pasamanos, puertas, asientos y llantas deberán estar en óptimas condiciones.
Los operativos tendrán lugar entre el 15 de junio y el 31 de julio en los Centros de Transferencia Modal de la capital, donde serán revisados las unidades y el trabajo de los conductores. Posteriormente se realizará una segunda fase de revisiones programadas por ruta, comenzando por las rutas que cuentan con mayor número de denuncias ciudadanas.
Martí Batres Guadarrama, secretario General de Gobierno, informó durante conferencia de prensa que los conductores que no cumplan con los requisitos recibirán sanciones graduales, como llevar la unidad al corralón o suspender de manera temporal el servicio.
En los casos más extremos, las sanciones por incumplir los acuerdos alcanzados para el aumento en la tarifa podrían llegar hasta la pérdida de la licencia de manejo del conductor, la pérdida de la concesión de transporte público y hasta la pérdida de la ruta para la organización de transportistas correspondiente.