Dulce María Reyes volverá a ver, ante un juez, a su expareja, Gerardo Guerra, tras señalarlo por violencia familiar, violencia política de género y amenazas a su integridad

Dulce María Reyes, regidora de ecología de San Martín Texmelucan, teme por su vida y la de su hija: su expareja, el empresario Gerardo Guerra, a quien denunció por violencia familiar, siempre lleva consigo un arma e incluso la amenazó al decirle que “carga un fusil R-15 en sus piernas”.

Acompañada de integrantes de la Red Plural de Mujeres, como Socorro Quezada y Roxana Luna, la regidora habló con medios antes de presentarse ante un juez de control para la audiencia en la que volverá a ver a su agresor.

El pasado 26 de junio, tras denunciar por violencia familiar al padre de su hija, Dulce María salió del domicilio donde vivía, escoltada por personal de la Fiscalía General del Estado (FGE).

Desde entonces se ha desatado en redes sociales una campaña para desprestigiarla como funcionaria pública y como mujer, algo por lo cual acusa directamente a Gerardo.

“Solicito medidas de protección más efectivas, las 24 horas del día. Él está enojado y va a estar más enojado después de la audiencia tenemos una hija por la que no se ha preocupado. Eso de da una certeza de no estoy segura, no quiero ser una cifra más en la lista”, expresó.

Dulce María no precisó desde cuando era violentada por su expareja, pero dijo que, desde que se hizo regidora y aumentaba la violencia, creció su valor para terminar esa relación y ahora también es víctima de violencia política de género.

“Cuando nosotros somos funcionarias los hombres de poder quieren seguirte controlando. Es una forma de decirnos: tú no puedes sin mí, aquí se hace lo que yo digo, yo soy el dueño. Hacen todo lo posible porque no salgas del círculo de violencia. Esos hombres van del enojo a la frustración y de la frustración a la ira, muchas lo hemos vivido”, señaló.

Dulce dijo que la presidenta municipal de San Martín Texmelucan, Norma Layón y sus demás compañeras han sororidad; ahora este asunto está en manos del Poder Judicial, que deberá juzgar su caso con perspectiva de género.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *