Las mujeres a pesar de los obstáculos que día a día aún se nos colocan en la vida de lo público, podemos ser un factor que permita favorecer los equilibrios.

Seguramente como yo, muchas personas al observar cómo van avanzando las decisiones políticas, nos estamos preguntado ¿Qué va a pasar después de que concluya este sexenio?

Sin duda para quien ocupe la posición de la Presidencia de la República a partir del 2024 no le será sencillo enfrentar esa enorme polarización provocada por el actual gobierno, tampoco le será fácil salir del estancamiento en que ya desde ahora estamos en las diversas materias, le será también muy difícil reconstruir instituciones y recuperar esperanzas y confianza perdidas.

Tal vez por eso creo que las mujeres a pesar de los obstáculos que día a día aún se nos colocan en la vida de lo público, podemos ser un factor que permita favorecer los equilibrios y contribuir al proceso de desarrollo democrático trazado en México.

Por supuesto hay que reconocer que durante el desarrollo de este sexenio muchas mujeres, otrora críticas, han preferido guardar silencio ante hechos que en otras épocas hubiese sido motivo de permanentes debates; tampoco podemos ocultar que otras mujeres llamadas progresistas, decidieron aplaudir todas las decisiones o ser pasivas, omisas y permisivas. Seguro que para el 2024 recuperaremos su voz.

Pero sin temor a equivocarme creo que para entonces como ahora, muchas de las mujeres en la vida de lo público continuaremos -cada cual desde nuestras trincheras- consolidando y dignificando nuestra representación política.

Sólo por mencionar algunos ejemplos que pudimos constatar en los últimos días y que formarán parte de la historia de este país.

Claudia Ruiz Massieu y Beatriz Paredes Rangel en el Senado, reflexionando con un gran conocimiento de la historia contemporánea, con argumentos, razonamientos jurídicos y legislativos, y con su demostrada experiencia en la administración pública; fijan su posición negándose al retroceso que significa la militarización del país que ha quedado demostrado no sólo se trata de militarizar la seguridad, también se trata de militarizar la vida pública; votaron en contra. Congruencia. Conocimiento. Experiencia. Expertise.

Tathiana Clouthier, manifestando con toda claridad ante el presidente que “ya no sumaba” a su gobierno, por lo que presentaba su renuncia al cargo de Secretaria de Economía. Aunque todavía no se han confirmado los motivos que la llevaron a tomar esa decisión, reiteradamente los medios han recuperado su posición -cuando era legisladora- en contra de la militarización del país, lo que hace suponer que uno de los motivos es el impulso definitivo del Presidente López Obrador en la militarización del país y prefirió renunciar. Congruencia.

Tal vez por ello creo que las mujeres pueden dar un nuevo orden a este país, que permita alcanzar los equilibrios entre los gobiernos divididos y esa pluralidad partidista que hoy lo conforman.

Tal vez las mujeres puedan ser el factor para reencauzar nuevamente el orden jurídico, social, económico que ha sido trastocado retomando los principales valores de toda sociedad democrática: igualdad, libertad, justicia y solidaridad.

Tal vez las mujeres puedan ser ese factor en tiempos tempestuosos como los que vivimos.

Sólo habrá que saber diferenciar con cuales mujeres se puede lograr.

Con las congruentes, expertas y con conocimiento o con las que perdieron la voz, que han callado, que han aplaudido y que le han permitido a este gobierno violentar nuestros derechos adquiridos.

rgolmedo51@gmail.com
@rgolmedo
Palabra de Mujer Atlixco
rociogarciaolmedo.com

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