La irradiación con UVC, una luz ultravioleta de onda corta, actúa como desinfectante al matar o inactivar microorganismos.
Limpiar los carritos del supermercado con desinfectante para evitar la propagación de COVID-19 podría ser pronto parte del pasado, al menos en Bélgica, donde ingenieros han creado una máquina que bombardea los carros de la compra con rayos de luz ultravioleta para sanitizarlos.
El invento se está probando en tres tiendas, donde los compradores toman un carrito, lo introducen en una caja de metal y cierran una puerta. Diez segundos más tarde, la puerta se abre y, con sus propias manos recién desinfectadas, se dirigen a hacer sus compras.
“Queríamos hacerlo aún más simple que un microondas”, dijo Jean Demarteau, miembro de una cooperativa de empresas sociales en la ciudad de Namur llamada OpenFlow, cuyos voluntarios diseñan objetos para ayudar a combatir el coronavirus.
“Tenemos el equivalente a más de 2.000 soles en términos de poder UVC recibido por el carro. Por lo tanto, los virus no tienen posibilidad de salir y, una vez finalizado el ciclo, la puerta se abre automáticamente y el carro está listo para ser usado”, agregó.
La irradiación con UVC, una luz ultravioleta de onda corta, actúa como desinfectante al matar o inactivar microorganismos. El invento belga cuesta 7.000 euros para el modelo más básico, pero los diseñadores dicen que se amortizará después de tres meses porque los supermercados no tendrán que emplear personas para limpiar los carritos entre clientes.