Es la primera vez que un cohete se dirige a la órbita con una tripulación carente de astronautas profesionales.
El primer vuelo espacial privado de SpaceX despegó el miércoles por la noche con dos ganadores de un concurso, una trabajadora del sector salud y su rico patrocinador, en el salto más ambicioso hasta ahora en el turismo espacial.
Es la primera vez que un cohete se dirige a la órbita con una tripulación carente de astronautas profesionales.
Los dos hombres y las dos mujeres a bordo de la cápsula Dragon pretenden pasar tres días dando la vuelta al mundo desde una órbita inusualmente alta, 160 kilómetros (100 millas) más alta que la de la Estación Espacial Internacional, y luego acuatizar en el mar cerca de las costas de Florida el fin de semana.
Al frente del vuelo está Jared Isaacman, de 38 años, quien hizo su fortuna con una empresa de procesamiento de pagos que creó en su adolescencia.
El viaje representa la entrada del fundador de SpaceX, Elon Musk, en la competencia por los dólares del turismo espacial. Isaacman es el tercer multimillonario que se lanza al espacio este verano, tras los breves vuelos de Richard Branson, de Virgin Galactic, y Jeff Bezos, de Blue Origin, en julio.
Junto con Isaacman en el viaje apodado Inspiration4 viajan Hayley Arceneaux, de 29 años, sobreviviente al cáncer en su niñez que labora de asistente médica en donde fue atendida, el Hospital Infantil de Investigación St. Jude en Memphis, Tennessee. Isaacman ha prometido donar 100 millones de dólares de su bolsillo al hospital y está intentando recaudar otros 100 millones en donativos.
En la nave también van Chris Sembroski, de 42 años, ingeniero informático de Everett, Washington, y Sian Proctor, de 51, educador universitario en Tempe, Arizona. Ambos ganaron sus lugares en sorteos.
Arceneaux es la estadounidense más joven en viajar al espacio y la primera persona en el espacio con una prótesis: una barra de titanio en la pierna izquierda.
El cohete Falcon reutilizado se elevó desde la misma plataforma del Centro Espacial Kennedy utilizada por los tres vuelos previos de la compañía para la NASA, los cuales fueron tripulados por astronautas. Pero en esta ocasión la cápsula Dragon se encamina a una altitud de 575 kilómetros (357 millas), apenas por debajo del Telescopio Espacial Hubble.
Su cápsula totalmente automatizada ya ha estado en órbita: Fue utilizada para el segundo vuelo de SpaceX a la Estación Espacial para la NASA, también tripulado por astronautas. El único cambio significativo es la amplia ventana con forma de domo en la parte superior en lugar de los mecanismos usuales para acoplarse con la Estación Espacial.