El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, informó que su gobierno desplegará 1500 soldados de refuerzo en la frontera con México, mismos que comenzarán su despliegue el 10 de mayo.
El despliegue de los elementos se dará un día antes del levantamiento de una norma por la que el país ha llevado a cabo expulsiones en caliente.
«Esas tropas llegarán tan pronto como el 10 de mayo y en las próximas semanas”, dijo el portavoz del Pentágono, general de brigada Pat Ryder al precisar que se trata de soldados en activo y no en la reserva, como ha ocurrido en ocasiones anteriores.
Ryder anunció este martes que el Departamento de Defensa iba a desplegar en la frontera con México a 1.500 uniformados temporalmente, por 90 días, a petición del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés).
A lo largo de ese periodo, el Pentágono va a explorar otras opciones en el futuro para sustituir esas fuerzas en activo por otras en la reserva o recurrir a la ayuda de contratistas.
Ejército y Marines, los soldados en la frontera
El portavoz precisó que, en concreto, las unidades que se enviarán a la frontera forman parte del Ejército y del cuerpo de Marines, e hizo hincapié en que esas tropas ofrecerán apoyo a los agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés).
El Gobierno del presidente estadounidense, el demócrata Joe Biden, ha precisado que los soldados no desarrollarán tareas de “aplicación de la ley”, sino respaldo a la CBP en la detección y vigilancia de la frontera.
De hecho, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, matizó hoy que esos efectivos adicionales efectuarán “tareas administrativas” y no “interactuarán con los inmigrantes”.
El anuncio se produce cuando EE.UU. se prepara para un aumento del flujo migratorio con motivo del levantamiento a partir del 11 de mayo del Título 42, una medida por la que ha llevado a cabo expulsiones en caliente con el pretexto de la pandemia.
“A la luz de los cambios el 11 de mayo y el aumento anticipado (en el flujo de migrantes), el DHS nos contactó y pidió apoyo en lo que respecta al número de militares que hay allí ahora”, indicó Ryder.
Actualmente se encuentran en la frontera unos 2.500 efectivos de la Guardia Nacional, que es un cuerpo castrense en la reserva, que se dedican a labores de respaldo a la CBP en la detección y vigilancia de la zona y dan apoyo de aviación.
Durante el mandato del expresidente republicano Donald Trump (2017-2021) se produjo un despliegue de más de 5.000 soldados regulares en la frontera sur que fue anunciado a unos días de las elecciones legislativas de 2018. En aquella ocasión fueron miembros de la Guardia Nacional.
Preguntado por el motivo de que esta vez se ha optado por mandar soldados en activo, Ryder lo justificó como un asunto de “preparación”: “Esto va de reaccionar. El DHS nos ha pedido apoyo y la capacidad de proporcionar un respaldo de forma rápida por parte de nuestras fuerzas en activo es realmente clave aquí”.
En ese sentido, agregó que al enviar militares en activo el Pentágono puede responder “muy rápidamente”.
El Título 42 ha permitido más de 2,5 millones de expulsiones de migrantes desde que entró en vigor en 2020 con el pretexto de la pandemia durante el mandato de Trump.
En una audiencia ante un comité del Congreso este mes, el director interino de la CBP, Troy Miller, señaló que se espera que el número de cruces irregulares en la frontera aumente a 10 mil al día una vez se suspenda la normativa.