En Quintana Roo casi medio millón de empleos dependen de esta industria, por lo que consideró que este es un problema económico y social.
El fuerte impacto que la pandemia ha tenido en la actividad turística en todo el país ha puesto sobre la mesa un escenario difícil de superar, con una economía en declive y la falta de recursos en varios rubros, por lo que algunos secretarios de turismo estatales han decidido afrontar de manera conjunta el reto de reactivar sus respectivas industrias.
Durante el Encuentro Expansión sobre la industria turística, Marisol Vanegas Pérez, secretaria de Turismo de Quintana Roo, indicó que en la entidad casi medio millón de empleos dependen de esta industria, por lo que consideró que este no es un problema sólo del sector, sino económico y social que se ha abordado de la mano de la iniciativa privada.
“Hicimos un pacto con el sector empresarial para no despedir a los trabajadores, y hubo datos muy visibles según los registros ante el IMSS. Logramos mantener 400,000 empleos ante el IMSS, perdimos 83,000, pero seguramente esta variación será temporal (…) Parte de la reactivación dependerá de lo bien que responda la iniciativa privada”, dijo.
Una parte de los apoyos para mantener el empleo también han tenido que salir de las arcas de los estados, como fue el caso de Veracruz, y debido al peso de la industria en la economía –concentrando 8.7% del PIB durante 2019– debería tener una mayor participación en temas presupuestales, consideró Xóchitl Arbesú Lago, secretaria de Turismo y Cultura de Veracruz.
“El turismo debe tener una silla más importante en la toma de decisiones. Si esta pandemia nos ha enseñado algo es la importancia de la movilidad de la comunidad, no sólo la derrama, sino todas ramas económicas que dependen de que la gente se mueva”, señaló.
El reto de reactivar a la industria se acentúa para entidades que no son consideradas de alta actividad turística, pero cuyos logros en este ámbito han sido arrasados por la pandemia, como ha sido el caso de Chihuahua.
“En tres años el tráfico aéreo creció en 65%, pero en tres meses perdimos el 75%. Este es un reflejo de lo que sucedió en el país, y afectará a todos los ámbitos del turismo, como el de aventura, naturaleza, médico –de gran importancia en Ciudad Juárez– y el de negocios, el más grande, siendo el nuestro un estado industrial con la mayor empleabilidad de manufactura y de exportaciones”, dijo Alejandra de la Vega Arizpe, Secretaria de Innovación y Desarrollo Económico de Chihuahua.
De la Vega Arizpe agregó que se está trabajando para obtener certificaciones de organizaciones como el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), pero enfatizó en la importancia de que las empresas, los estados y el gobierno federal, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores, promocionen estos esfuerzos.
”La desaparición del Consejo de Promoción Turística de México ha sido una pérdida muy dura para todos los estados”, dijo.
Con esto concuerda la iniciativa privada, que considera que las prioridades en materia presupuestaria no están dadas conforme a las condiciones de la industria.
“El manejo de crisis y la imagen que se proyecte hacia el exterior será la mejor promoción, pero si hoy no tenemos 6,200 millones de pesos del Derecho de No Residente porque están en otro proyecto, ¿por qué no encontrar formas diferentes para hacerlo? Si se quiere hacer el Tren Maya, está bien, pero no quitando una parte importante para el turismo para pasarlo a una parte de infraestructura”, advirtió Braulio Arsuaga Losada, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET).
Estos esfuerzos adquieren una mayor relevancia en un entorno que va perdiendo claridad en términos de atracción de inversiones, como es el caso de Querétaro, donde el sector hotelero ha dado señales de mayor incertidumbre.
“Ahorita no sabemos qué va a pasar. Hay hoteles que se acaban de inaugurar de cadenas importantísimas, pero no hay claridad. Nos queda claro que la alianza que hacemos con diferentes estados es por eso, porque sabemos que no hay recurso”, dijo Hugo Burgos García, titular de turismo de Querétaro, refiriéndose a una alianza que recientemente la entidad realizó con Zacatecas y San Luis Potosí.
Aunado a estos esfuerzos, los representantes del sector consideraron que las medidas deben darse no sólo para superar la pandemia, sino para mantenerse competitivos en un entorno más desafiante, y sobre todo, a largo plazo.
“Muchas empresas llegan, invierten, y es el empresario el que se queda 40 años en el país, mientras los gobernadores pasan”, concluyó Arsuaga.