Laura Elena Martínez, de la UNAM, advirtió que la producción es errática por precios y políticas, por lo que se debe fortalecer el consumo y cadenas productivas
Desde 2016 se ha debilitado en Tlaxcala la producción de amaranto, un alimento en que el estado de Puebla es el líder nacional, indicó Laura Elena Martínez Salvador, del Instituto de Investigaciones Sociales (IIS) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Durante la conferencia «Amaranto: más que una alegría, un alimento ancestral«, Martínez Salvador explicó que en Morelos la producción se fue a la baja debido a los precios rurales.
Subrayó que en América esta planta se ha cultivado desde hace cinco o siete mil años y para las culturas prehispánicas tiene un profundo significado, pues se trata de una planta que se caracteriza por su resistencia y adaptabilidad a cualquier condición climática y ecosistema ya que, para su producción, se requiere de un 40 por ciento menos de agua que la cebada y el trigo.
La investigadora advirtió que la producción es errática a consecuencia de los precios en el campo, las políticas o programas estatales, por lo que es necesario fortalecer su consumo y desde luego las cadenas productivas.
El amaranto es uno de los 50 alimentos del futuro por ser una fuente de vitaminas A, B, C, B1, B2 y B3, así como ácido fólico, calcio, hierro y fósforo y rica en aminoácidos, con una producción de bajo impacto ambiental, subrayó el director general de la Organización para la Productividad de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader), Héctor Robles Berlanga.
En el padrón del programa Producción para el Bienestar están dados de alta 592 productores originarios de Puebla, Tlaxcala, la Ciudad de México, Oaxaca, Hidalgo, el Estado de México y Morelos.