Para una fiesta de 100 personas se tendrían que invertir al menos 15 mil pesos y la mitad del costo debe ser absorbido por los clientes.
En los salones y jardines de eventos sociales ya se han realizado fiestas, hasta cierto punto clandestinas, ya que no se ha podido cumplir con realizar las pruebas Covid a los asistentes, admitió Víctor Picazo Pérez, representante de la asociación Salones Unidos de Puebla.
En entrevista, dijo que ha tenido conocimiento de que no se ha cumplido con las pruebas Covid porque para una fiesta de 100 personas se tendrían que invertir al menos 15 mil pesos para realizarlas y la mitad del costo debe ser absorbido por los clientes.
«Digo que hasta cierto punto son clandestinas porque se pide el uso de cubrebocas, de gel antibacterial, se cuida el aforo y la sana distancia, no hay pista de baile y demás aspectos que están al alcance, pero las pruebas para detectar posibles casos de Covid no se han podido hacer».
Aunque evitó mencionar el número de eventos que ya se realizaron en Puebla bajo estas condiciones, refirió que no han sido demasiados porque el sector todavía no tiene una recuperación como tal.
«Ahorita uno de los principales problemas que tenemos es que muchos de nuestros apartados siguen así, hay reservaciones, por ejemplo para 15 años y en este momento la festejada ya tiene 17, entonces muchos clientes lo que quieren ya es la devolución de su dinero porque el objetivo de su fiesta ya pasó».
Picazo Pérez señaló que la mayoría de los 600 socios están buscando mantener las reservaciones e ir atendiéndolas conforme al requerimiento de los clientes, sin embargo la mayoría no está interesado en hacer eventos con las condiciones que exige el actual decreto estatal.