Quedarse en casa, lavado de manos, uso de gel y cubrebocas, ayudarán a combatir al COVID-19.
A siete semanas de la detección del primer caso de COVID-19 en México, y de acuerdo a los datos presentados en el comunicado técnico diario del 14 de abril de 2020, en nuestro país se han reportado 5 mil 399 casos confirmados, 10 mil 792 casos sospechosos, y 406 decesos.
La tasa de incidencia (número de casos por cada 100 mil habitantes) es de 4.2. A nivel mundial 1 millón 844 mil 863 casos se han confirmado y han ocurrido 117 mil 021 defunciones. Agregó que la tasa de letalidad global es de 6.3%.
En Puebla se han registrado 276 casos positivos, y 27 defunciones, expresó la Rocío Baños Lara. En conferencia de prensa la investigadora de la Facultad de Medicina de la UPAEP subrayó que la información científica y técnica se publica constantemente y por lo tanto hay actualizaciones diariamente en varios aspectos, por lo que invitó a la gente a mantenerse informada sobre la pandemia y utilizar fuentes confiables.
Asimismo, dijo que entre estos aspectos están los síntomas con los que se presenta la infección por SARS-Cov-2 (el agente causal de la COVID-19), además de las investigaciones que se están haciendo sobre la posibilidad de la infección en las mascotas, y de la recomendación del uso de los cubre bocas o mascarillas para protección de las personas y evitar que se contagien.
Baños Lara habló sobre los avances que se han obtenido con respecto a la presencia del COVID-19, y que desglosa a continuación en diferentes puntos: Presentación de la infección. En la mayoría de los pacientes, la infección por el Covid-19 se presenta con fiebre, tos y fatiga.
Frecuentemente se presenta dificultad para respirar, siendo éste un signo de alarma. La enfermedad se ha presentado también con dolor muscular, dolor de cabeza, escurrimiento nasal y dolor de garganta. En un menor número de casos, los pacientes presentan diarrea y vómito (2-4). Un síntoma descrito recientemente es la pérdida o disminución del olfato y del gusto (5, 6). Aunque otros síntomas se han reportado de manera anecdótica, tales como manchas en pies (7), todavía no hay evidencia científica documentada.
Infección en animales de compañía.
En Hong Kong se reportó el caso de dos perros, en Bélgica el de un gato, y en los Estados Unidos de América, el de una tigresa que resultaron todos positivos al SARS-CoV-2. Estos casos se han publicado en medios de comunicación digitales (8-10), sin embargo ningún reporte técnico o artículo científico está disponible, a partir del cual se pueda indagar más acerca de la sintomatología de los animales, la técnica utilizada para el diagnóstico, o los resultados obtenidos.
Sin embargo, recientemente se publicó un trabajo en el que experimentalmente se infectaron perros, cerdos, pollos, patos, hurones, y gatos con dos cepas diferentes de SARS-CoV-2. Los investigadores reportan que el virus se replica pobremente en los primeros animales, pero en hurones y gatos el virus se replica mejor. Además, los investigadores, pusieron en contacto a gatos experimentalmente infectados, con gatos sin infectar, y después de unos días se encontró material genético en uno de los tres gatos expuestos (11).
Este hallazgo debe tomarse con cuidado, ya que no se ha documentado la transmisión de los animales de compañía hacia los seres humanos. Las recomendaciones del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos de América (Centrer for Disease Control and Prevention, CDC) con respecto a los animales de compañía son, entre otras: evitar que las mascotas salgan y que interactúen con otras mascotas fuera de casa, y pasear a los perros auxiliados de correa, manteniendo la distancia recomendada con respecto a otros perros y personas (1.5 metros).
Si los poseedores de un animal de compañía están enfermos, es importante mantener a los animales aislados, evitar el contacto con ellos (evitar caricias, besos, abrazos, compartir alimentos, y dormir en la misma cama, evitar también las demostraciones de afecto que impliquen contacto de ellos a los seres humanos). Si irremediablemente una persona enferma necesita seguir cuidando de sus mascotas, es necesario usar cubrebocas al acercarse a ellos (12).
Es importante sobre todo no abandonar a los animales, y acudir al médico veterinario si hay dudas o signos de enfermedad en las mascotas. Uso de cubrebocas La OMS recomienda su uso sólo para personas enfermas o si se está al cuidado de una persona enferma (13); mientras que la CDC sugiere usar cubrebocas de tela como una medida adicional cuando el distanciamiento social sea difícil de conseguir (14).
En el 2013, un grupo de investigadores realizaron un estudio para probar la eficiencia de diferentes materiales domésticos para bloquear el paso de dos microorganismos (Bacillus atrophaeu y el Bacteriófago MS2); con la finalidad de utilizar estos materiales para hacer cubrebocas.
El material que menos permitió el paso de los microorganismos fue la bolsa de aspiradora; sin embargo, éste es un material difícil para hacer cubrebocas, ya que es rígido, duro y las gotitas de saliva que salen de la boca al hablar o al exhalar se quedan pegadas.
Otros materiales con buena capacidad bloqueadora para estos microorganismos, y sin el problema de las bolsas de aspiradora, fueron las toallas textiles de cocina y las fundas anti-bacteriales para almohada.
El material que más permitió el paso de estos microorganismos, fue la seda (15). Otro grupo de investigadores, publicaron los resultados de una serie de experimentos hechos con ayuda de pacientes que resultaron positivos a algunos coronavirus (NL63, OC43, 229E and HKU1), virus influenza (A y B) y rinovirus. Se cuantificó el virus en diferentes muestras de hisopados nasales y de garganta de esos pacientes, y en gotículas y aerosoles respiratorios, que pasaron a través de los cubrebocas de esos pacientes.
Los resultados muestran que los cubrebocas impidieron el paso de coronavirus y del virus influenza, pero no de rinovirus. Esta evidencia sugiere que los cubrebocas podrían ser útiles para evitar que las personas con síntomas de enfermedad respiratoria contagien a otras personas algunos tipos de virus (16).
Aún no hay evidencia científica de la protección que los cubrebocas pudieran ofrecer a personas que no están enfermas. La postura de las autoridades de salud en México es que en la comunidad no debe usarse el cubrebocas, pero hacen un llamado a que si deciden usarlos, se usen correctamente (17).
Algunas recomendaciones para usar el cubrebocas son: Recomendaciones generales El cubrebocas debe ajustarse bien a la cara, cubriendo nariz y boca, si está suelto o se juega no cumple su función. El cubrebocas no sirve si está en el cuello, en la frente, el cabello, o la nuca.
Lavarse las manos antes de colocarse el cubrebocas y después de retirarlo. Si el lavado de manos no es posible, usar gel de alcohol al 70%. Verificar que el cubrebocas esté íntegro. Identificar el lado superior y el que estará en contacto con el rostro, y tener cuidado de usarlo siempre en esa orientación. Evitar manipular el cubrebocas una vez colocado, no debe retirarse para hablar, sólo se debe retirar para comer, y para desecharlo.
Para retirarlo, sujetarlo de las correas. Recordar el lavado de manos después de retirarlo. Recomendaciones para cubrebocas desechables Los cubrebocas desechables deben cambiarse cuando se humedezcan. Los cubrebocas de pacientes enfermos deben descartarse en los residuos biológico-infecciosos. Recomendaciones para cubrebocas de tela. Si se confeccionan en casa, que sean de algodón. Los cubrebocas de tela deben lavarse con agua y jabón, preferentemente a temperaturas entre 60 y 90oC. Finalmente, el cubre bocas no es útil si no se acompaña de otras medidas de prevención.
La sana distancia, el lavado de manos con agua y jabón durante 20 segundos, y evitar tocar ojos, nariz y boca, son hábitos que deben permanecer durante el resto de la contingencia sanitaria por la COVID-19 y en la medida de lo posible, deben acompañarnos siempre.
