Este aumento está por encima de otros productos electrónicos en el mercado como las pantallas, las que se revaluaron en este lapso cerca de 30 por ciento.
Los precios de los videojuegos y consolas en México tuvieron que pasar a otro nivel por culpa de la depreciación del peso y los nuevos impuestos a ventas vía digital, por lo que llegaron a subir hasta 60 por ciento en los últimos siete años.
En 2015, el precio de un juego para consolas de Nintendo, Sony (Playstation) o Microsoft (XBox) rondaba entre los 999 pesos a mil 200, pero actualmente en plataformas como Amazon o en las de las propias empresas pueden ofrecerse entre mil 300 pesos a mil 700.
Este aumento está por encima de otros productos electrónicos en el mercado como las pantallas, las que se revaluaron en este lapso cerca de 30 por ciento. “Empresas como Take2, Activision, entre otras, empezaron a dar sus juegos en 70 dólares y esto es un alza que no se daba tan acelerada”, aseguró David Alonso Santiváñez Antúnez, CEO & fundador de GameMetron, consultora especializada en temas de eSports e industria creativa de videojuegos.
Santiváñez explicó que los precios de esta industria se rigen con el comportamiento del dólar estadunidense; por tal motivo, el consumidor mexicano ve impactado de manera sustancial un incremento en los costos tras la depreciación del peso mexicano. “Lo que controla el mercado en la compraventa del dólar va a terminar afectando en muchos otros lugares donde justamente la moneda pueda estar depreciada o donde la moneda de curso legal no es el dólar”, manifestó el especialista.
“El entretenimiento del videojuego es caro. El consumidor en algún momento lo va a pagar. La depreciación de nuestra moneda, el tema de los impuestos que se agregaron justamente en el consumo digital y finalmente los temas de la pandemia está afectando a los mexicanos en el consumo del videojuego”, apuntó el CEO de GameMetron.
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