Se ocupan de decidir cuáles son falsas y qué se debe mostrar a los usuarios, pero la financiación de estas entidades generan serias dudas sobre la imparcialidad de su actividad.
Las organizaciones que reciben dinero del Gobierno de EE.UU., así como de personalidades como el magnate y especulador financiero George Soros, tienen un gran impacto en la formación del flujo de noticias en Facebook.
Estas se ocupan de verificar publicaciones en la red social y deciden cuáles de ellas son falsas y qué se debe mostrar a los usuarios. No obstante, las fuentes de la financiación de estas entidades generan serias dudas sobre la imparcialidad de su actividad. Una investigación de RT ha revelado que, bajo la apariencia de una misión de búsqueda de la verdad, el ‘establishment‘ estadounidense ha construido una herramienta para la censura y luchar contra la disidencia en las redes sociales.
A finales de 2016, en medio de la polémica sobre la propagación de las noticias falsas durante la campaña presidencial en Estados Unidos, Facebook lanzó un proyecto de verificación de lo que se publica en la plataforma. De ello se encargó la formalmente independiente Red Internacional de Verificación de Datos (International Fact-Checking Network, IFCN), cuyos miembros determinan qué publicaciones son fidedignas y cuáles no.
La IFCN es un proyecto del Instituto Poynter para Estudios Mediáticos y fue creado en 2015. En los últimos años, el Instituto Poynter ha obtenido subvenciones de entidades como Google, MacArthur Foundation, Bill and Melinda Gates Foundation, Carnegie Foundation, Open Society Foundations y Omidyar Network, entre otras.
Las últimas dos organizaciones destinaron 1,3 millones de dólares para la ONG solamente en 2017 con el fin de desarrollar una red de verificación de datos.
George Soros y Departamento de Estado de EE.UU.
La Open Society Foundations es una fundación del polémico magnate George Soros, inversor y filántropo húngaro-estadounidense conocido como uno de los especuladores financieros más exitosos del planeta y «el hombre que arruinó al Banco de Inglaterra» en 1992.
Soros también era uno de los principales patrocinadores de la entonces rival de Donald Trump, Hillary Clinton, a quien donó más de 10,5 millones de dólares para su campaña presidencial, según el Centro para la Política Receptiva. La victoria de Trump le habría causado al magnate pérdidas en bolsa por casi 1.000 millones de dólares.
Omidyar Network, por su parte, es un proyecto del empresario Pierre Omidyar, fundador de eBay y patrocinador de iniciativas en países occidentales para ‘defender la democracia’ de supuestas interferencias de Moscú. Entre los beneficiarios de su financiación se encuentran grandes centros de difusión de la agenda antirrusa que acusan al Kremlin de injerencia en las elecciones presidenciales de EE.UU. de 2016, como Defending Democracy Together, Alliance for Securing Democracy o Data for Democracy.
Las estructuras de Omidyar también se vieron involucradas en el proceso político de Ucrania. Junto con la Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional (USAID) y la embajada estadounidense en Kiev, el multimillonario colaboró en el lanzamiento del canal televisivo Hromadske TV, que cubría en detalle las manifestaciones y disturbios del denominado ‘Euromaidán’, que terminó con el derrocamiento del entonces presidente prorruso Víktor Yanukovich.
Además de recibir subvenciones de Soros y Omidyar, el Instituto Poynter colabora de manera activa con el gobierno estadounidense. Sus servicios han sido contratados por la Agencia de EE.UU. para Medios Globales (USAGM, por sus siglas en inglés), que controla medios como la Voz de América y Radio Free Europe/Radio Liberty, y el Departamento de Estado, que le pagó por mejorar competencias de periodistas locales de Gambia, India y Turquía.