Los recuerdos de la emblemática banda golpearon a los fanáticos con una serie de imágenes en video que mostraron paso a paso la historia de Soda Stereo.
Con imágenes que parecían tener volumen y flotar en el escenario, gráficos que se movían de forma lenta dando atmósferas a cada uno de los temas y con un puñado de invitados, fue como Charly Alberti y Zeta Bosio hicieron un homenaje al legado que, junto con Gustavo Cerati, crearon como Soda Stereo.
Sesenta mil asistentes se llenaron de recuerdos y buen rock en español la noche del jueves cuando la gira Gracias Totales-Soda Stereo llegó, en medio del anuncio de pandemia del coronavirus, al Foro Sol de la Ciudad de México.
Dos minutos después de las nueve de la noche los recuerdos de la historia de la emblemática banda golpearon a los fanáticos con una serie de imágenes en video que mostraron paso a paso la historia de Soda Stereo, cerrando con una imagen de Gustavo Cerati la cual arrancó la ovación del público
Así, con Sobredosis de TV, en voz de Cerati, fue como Charly Alberti y Zeta Bosio tomaron el escenario para dar inicio al homenaje a su legado.
“Buenas noches, México”, lanzó Zeta al público que comenzó a moverse de un lado al otro con las primeras notas de Hombre al agua, la cual estuvo a cargo de Richard Coleman, el músico que al inicio de Soda era parte del entonces cuarteto.
“Oh eh, oh eh, oh eh, Soda, Soda” fue el grito que los fans revivieron en el Foro Sol después de 13 años, año en que la banda se presentó con su alineación original. Y con las primeras notas de Sueño Stereo, en la casi inaudible voz de León Larregui, hizo que los presentes decidieran sacar sus celulares y captar el momento.
“Charly, Charly, Charly, Zeta, Zeta, Zeta, Gustavo, Gustavo, Gustavo”, clamaba el público mientras la banda daba las primeras notas de El rito, en la que la voz estuvo a cargo de Álvaro Henríquez.
De pronto, una voz conocida por los mexicanos. Las palabras de Rubén Albarrán aparecieron en las pantallas arrancando la ovación del público que no dejaba de bailar con el sonido de La cúpula.
Figuras en tonos aqua y luces azules avisaron al público que uno de esos éxitos que consagró a la banda estaba por llegar. Así, con un video de Julieta Venegas cantando Signos, Charly y Zeta revivieron la nostalgia.
Walas, a través de otro video, fue quien le dio el toque necesario de sensualidad que requirió un tema como Juego de seducción.
Pero fue Benito Cerati, ataviado con una camisa como las que usaba su papá, cabello oscuro y su impresionante parecido físico con él, lo que hizo que a varios se les enchinara la piel y se les llenaran los ojos de lágrimas al cantar Zoom.
Trátame suavemente, en voz de Adrián Dárgelos, vocalista de Babasónicos; Andrea Echeverri, con Pasos, para minutos después ver en las pantallas a Gustavo reviviendo En la ciudad de la furia; y Robi Draco Rosa, con En remolinos, fueron parte de la noche.
Un video de la sesión fotográfica que la banda realizó en Teotihuacan en 1988 fue el preámbulo para que la gente gritara y saltara con Cuando pase el temblor y más cuando apareció Gustavo Santaolalla para dar vida a la voz y guitarra de su tocayo.
La imagen de Gustavo Cerati en las pantallas cantando Fue —con un fondo azul y Zeta y Charly en los otros dos extremos— hizo recordar al público la fuerza que los tres generaban al estar en un escenario, provocando que el público iluminara el Foro Sol con sus celulares.
Simón Bosio fue el encargado de dar vida a la guitarra de Gustavo, mientras que la chilena Mon Laferte cantó Un millón de luz.
Fernando Ruiz Díaz, en un video, dio voz a Persiana americana, mientras que Juanes hizo lo propio con Prófugos.
Después de una breve pausa y aparentemente despedirse de su público, Zeta y Charly regresaron al escenario, con Gustavo en las pantallas, para dar vida a Primavera O.
Fue entonces cuando llegó De música ligera, con Chris Martin —vocalista de Coldplay— en un video, quien interpretó el tema con el que Gustavo Cerati acuñó la frase “Gracias totales”.