El mandatario también considera necesario investigar las operaciones que hay en el bar donde sufrieron el levantón estas personas
«Es muy fácil que un hecho violento ocurra y después culpemos a la autoridad, cuando cerramos los ojos sobre asuntos de un comportamiento inadecuado de un familiar», dijo el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta ante las manifestaciones previstas por familiares y amigos de los tres jóvenes de Coronango asesinados y cuyos cadaveres fueron encontrados en Tlaxcala.
El mandatario dejó entrever que estas personas, cuyos cuerpos ya fueron identificados por su madre, estarian relacionados con actividades ilícitas, por lo que exhortó a la sociedad a tener un bueno comportamiento.
Durante su acostumbrada conferencia de prensa virtual, reveló que hay muchos indicios de que este trío podría haber sido asesinado en Puebla y sus cuerpos tirados en el municipio tlaxcaltecas de Papalotla.
Asimismo, llamó al presidente municipal de Coronago, Gerardo Sánchez Aguilar, como a todos los demás de la entidad, a atender las demandas de la sociedad en materia de la sociedad, tiene que darse la cara para eso.
En este sentido, también consideró necesario investigar las operaciones que hay en el bar donde habrían sido privadas de la vida está persona, porque, según versiones periodísticas, sería un centro de distribución de droga.
