Tras una visita practicada por la Comisión el 26 de mayo se garantizó que a diario se realiza la limpieza y desinfección de los dormitorios y áreas comunes.
El Gobierno del Estado aseguró que se han acatado las observaciones realizadas por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), con relación a la atención por la pandemia de COVID-19 en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de Puebla, conocido como San Miguel.
A través de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) se informó que dar cumplimiento a las peticiones de la CNDH, se instrumentaron las acciones siguientes: fortalecimiento del filtro sanitario de ingreso al Cereso para tomar la temperatura a los visitantes y el lavado de manos; desinfección periódica durante el día de los torniquetes de seguridad que permiten el acceso al lugar; implementación de charlas con las personas privadas de la libertad sobre la importancia del uso de cubrebocas, la higiene y la sana distancia.
También, la dependencia proporcionó los materiales que se requieren para cumplir con las medidas de prevención, a diario se realiza la limpieza y desinfección de los dormitorios y áreas comunes, a fin de reducir el riesgo de propagación del virus, y en el comedor se instruye a las personas privadas de la libertad a mantener la distancia adecuada.
Asimismo, hay dos espacios dedicados exclusivamente para la estancia de personas con síntomas propios del COVID-19, y en el caso de que resulten positivos tras la aplicación de las pruebas, son enviados al Centro de Internamiento Especializado para Adolescentes (CIEPA), habilitado especialmente para la atención.
Durante una visita realizada el pasado 26 de mayo, personal de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos -además de las observaciones- también hizo un reconocimiento por las medidas de protección que se adoptaron previamente para atender la contingencia.