El Ejecutivo local incrementó ese año su presupuesto en salud, seguridad y justicia en 26 y 3 por ciento, respectivamente
Durante 2020 -primer año marcado por la pandemia- el gobierno de Tlaxcala, entonces gobernado por Marco Antonio Mena Rodríguez, gastó 14 por ciento más del presupuesto aprobado por el Congreso del Estado, es decir, 12 mil 900 millones de pesos más, refiere el “Informe Estatal del Ejercicio del Gasto 2021. Gastos en Pandemia: ¿Cambiaron las prioridades?” del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Según el IMCO, el Ejecutivo local incrementó ese año su presupuesto en salud y seguridad y justicia en 26 y 3 por ciento, respectivamente, mientras que redujo en 2 por ciento el presupuesto para educación, en comparación con el presupuesto de 2019.
Para salud y seguridad gastó 4 mil 974 millones y mil 615 millones de pesos, es decir, mil 293 millones de pesos más para sanidad y 48.4 millones de pesos más para seguridad y justicia; en cambio, para educación gastó 9 mil 448 millones de pesos, 188.9 millones de pesos menos que en 2019.
De hecho, el IMCO señala que Tlaxcala fue una de las tres entidades que más invirtió en salud durante 2020, junto con Yucatán y Coahuila, estados que incrementaron su inversión en este rubro en 39 y 34 por ciento.
Aunque el IMCO da por hecho que el gasto en salud fue para atender la pandemia, advierte que los ingresos excedentes son cheques en blanco porque no están debidamente regulados; en este sentido, Tlaxcala obtuvo 14 por ciento de ingresos excedentes.
Con estos datos, Tlaxcala es la sexta entidad que gastó más de lo presupuestado, solo después de Quintana Roo con un gasto 55 por ciento superior a lo presupuestado, Baja California con 30 por ciento, Oaxaca 20 por ciento, Veracruz 19 por ciento y Morelos 14 por ciento; mientras que Puebla solo ejerció lo aprobado por su Congreso.
A nivel nacional, en 2020 los gobiernos estatales gastaron 2.3 billones de pesos, 5 por ciento más de lo presupuestado por sus congresos, es decir, 103.3 mil millones de pesos más.
El IMCO midió la información financiera de los ejecutivos estatales, en qué gastaron y si cumplieron con la norma; para ello, se analizaron 2 mil 304 documentos para medir la disponibilidad de la información.
Al respecto, Tlaxcala cumplió en 74 por ciento con la norma contable y se ubica debajo del promedio nacional de 87 por ciento para transparentar la información sobre sus ingresos y en qué lo gastaron; pese a la calificación, la entidad mejoró en posiciones en comparación con 2015.