La extracción intensiva del agua en la zona ha arrastrado la arcilla y limos que cohesionan la tierra y dejaron sólo arena de distintos volúmenes.
La intensiva extracción de agua, cambios climáticos y un suelo desgastado, fueron las causas principales del socavón de 123 por 126 metros en la junta auxiliar de Santa María Zacatepec, perteneciente a Juan C. Bonilla.
Así lo determinaron los estudios que realizaron científicos del Instituto Politécnico Nacional (IPN) en su primera fase, cuyos resultados arrojan que el agua del socavón es apta para el consumo humano.
En la presentación del dictamen, la secretaria de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial, Beatriz Manrique Guevara explicó que aunque la Conagua tiene el registro oficial de 47 pozos en la zona, en realidad hay muchos más, aunque no precisó una cifra.
Indicó que el 80 por ciento de pozos artesanales son para uso agrícola, un 15 por ciento para uso doméstico y el 5 por ciento restante para uso industrial.
Concluye @IPN_MX estudios geofísicos e hidrológicos en #socavón de Zacatepec
? Causas: extracción intensiva de agua y características del suelo, además de 3 años de sequía y repunte de lluvias
?️Informa Beatriz Guevara, titular @AmbienteGobPueUrbano | Noticias México pic.twitter.com/4W3O1C1PO6
— URBANO (@urbano_noticias) July 8, 2021
Lo anterior, dijo, ha provocado una disminución del nivel de donde se extrae el agua, pues hace dos años se hacía a 8 metros de profundidad y actualmente a 3 metros.
Además que la extracción intensiva del agua en la zona ha arrastrado la arcilla y limos que cohesionan la tierra y dejaron sólo arena de distintos volúmenes.
Dicha condición se vio reforzada por la sequía que hubo durante tres años, por lo que el suelo se volvió sumamente arenoso y disminuyó su resistencia, que también se vio afectada por el incremento de hasta 85 por ciento de la precipitación pluvial este año.
«La acumulación de estos elementos a lo largo de muchos años ocasionó que el suelo en ese punto específico llegara a su límite de resistencia y se generó este colapso», acotó.
Manrique Guevara dijo que en los inicios de la segunda fase de estudios, los científicos han detectado oquedades en otros puntos de la zona, lo que obliga a ampliar el perímetro de seguridad establecido.
Por ello, señaló que es necesario actualizar los Atlas de Riesgo y los planes de desarrollo urbano de los municipios de la región.
Delimitarán zona de riesgo de socavón con diálogo
En su intervención, el secretario de Infraestructura, Daniel Gámez Murillo señaló que en un máximo de 10 días se establecerá un perímetro de mil 780 metros para evitar que personas se acerquen a la zona de riesgo, que tiene una extensión de 25 hectáreas.
Al respecto el gobernador Miguel Barbosa Huerta señaló que la delimitación será con diálogo con los ciudadanos que serán afectados y a quienes de ser necesario se indemnizará, con acuerdos por escrito, pues en el proceso tocaría a más predios.
Por su parte, la secretaria de Gobernación, Ana Lucia Hill Mayoral anunció que científicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) se sumarán a los estudios realizados sobre el socavón.
Mientras que, la titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Ana Laura Altamirano indicó que el próximo sábado se definirá la ubicación del terreno que el gobierno estatal comprará para construir la vivienda de la familia Sánchez Xalamihua que resultó afectada por el socavón.
Al tiempo comentó que solo falta un agricultor por recibir la indemnización correspondiente por la afectación a sus tierras de cultivo, aunque no precisó cuántos pagos se han realizado ni los montos.
