La aplicación de infracciones tuvo reducciones más acentuadas a partir del mes de octubre del año pasado.
En tan sólo 12 meses, la cantidad de infracciones impuestas a través del Programa Operativo Alcoholímetro en la capital del estado, se redujo un 29.68 por ciento, señala información oficial del Ayuntamiento de Puebla.
De acuerdo con la respuesta a la solicitud de transparencia CGT-UT-249/2019 presentada por el Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación de los Municipios (IGAVIM), esto representó que se dejaron de aplicar 423 multas, al pasar de mil 425 en 2017 a mil dos en 2018.
La tendencia a la baja fue constante prácticamente todo el año, salvo en junio que se igualaron las cifras (79 ambos años); pero la disminución en las cifras se acentuó a partir de octubre, mes en que se renovó la administración local.
En el mes del relevo municipal, la caída en la aplicación de infracciones fue de 39.7 por ciento, en noviembre fue de 52.48 por ciento –siendo la más pronunciada en el año– y para diciembre, la caída fue de 44 por ciento a pesar de ser un mes con constantes convivencias y consumo de alcohol.
El programa Alcoholímetro Colegiado de la ciudad de Puebla consiste en el despliegue de retenes en vialidades principales de la capital, donde se aplican pruebas de alcoholemia para verificar que los automovilistas no conduzcan bajo el influjo de bebidas embriagantes.
Los exámenes pueden resultar negativos o con intoxicación que puede ser leve, moderada o severa, lo que deriva en el retiro de la unidad –que es llevada al corralón– y la posibilidad de ser llevado ante el juez calificador.
Sin embargo, el Código Reglamentario de Puebla capital establece que esto puede ser motivo de suspensión temporal o cancelación definitiva de la licencia para conducir, esto último si reincide más de dos veces en dos meses.