Para evitar otro bloqueo sobre la autopistas México-Puebla, sobre todo a la altura de Santa Rita Tlahuapan, el gobernador, Sergio Salomón Céspedes Peregrina consideró que se necesita de la intervención de autoridades federales y que se establezca un protocolo de actuación donde se considere el uso de la fuerza pública para desalojar a los manifestantes.
El mandatario lamentó las situación que vivieron cientos de automovilistas la tarde-noche del viernes, al quedar atrapados durante más de 13 horas en esta vialidad, en ambos sentidos, por el bloqueo que aplicaron familiares de dos hombres detenidos por participar en el linchamiento de un joven.
Explicó que desde el primer momento hubo presencia de personal de la Secretaría de Gobernación para negociar, sin embargo aclaró que no se podía acceder a la exigencia de los manifestantes porque implicaba «impunidad» y violar la ley.
Informó que ante lo ocurrido, sostendrá una reunión con autoridades federales para deslindar las responsabilidades sobre este caso en particular y se espera que se presenten las denuncias penales que corresponda, al recordar que el cierre de vías de comunicación es un delito.
«No podemos trabajar bajo presiones, porque estaríamos quitando autoridad y quitando responsabilidad a los que hacen su trabajo conforme a derecho como es la Policía Estatal y la Fiscalía General del Estado«, aseveró.
Lanzó un llamado a los vecinos de Santa Rita Tlahuapan a no cerrar carreteras, a actuar en apego a la ley, y a la sociedad a tener comprensión para que el gobierno pueda tomar acciones más contundentes, como son los desalojos.
Cabe mencionar que la toma de la autopista México-Puebla se realizó el día viernes poco antes de las 18 horas y fue hasta las 2:30 de la mañana del sábado 10 de junio que se reabrió la vialidad, sin embargo por la excesiva carga vehicular, la circulación fue muy lenta por otras dos horas ya que había una fila de 16 kilómetros en ambos sentidos.
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