Anunció que el próximo domingo 11 de agosto visitará los municipios de Cohuecan y Tepexco para respaldar a las autoridades y reestablecer la gobernabilidad.
Con presencia gubernamental en cada rincón del estado y con la atención de las principales necesidades de la sociedad: la pobreza y la inseguridad, la actual administración estatal pagará la deuda social que se generó en Puebla por la opulencia, derroche, falsa modernidad y un débil estado de derecho con el que se gobernó en el pasado y que han propiciado problemas sociales, como los linchamientos registrados en Cohuecan y Tepexco, comprometió el gobernador Miguel Barbosa Huerta.
“Puebla es el estado de las contradicciones y de la desigualdad. En Puebla la presencia del estado de derecho, es débil, los hechos ocurridos en comunidades pobres de los municipios de Coehuecan y de Tepexco, así lo acreditan», reconoció.
Barbosa Huerta calificó como inadmisible que la ciudadanía haga justicia por su propia mano tras señalar que la procuración de justicia es una obligación del Estado que debe ser completa y oportuna. Por lo anterior, anunció que este domingo 11 de agosto visitará los dos municipios antes mencionados para respaldar y fortalecer a las autoridades municipales, auxiliares y comunitarias, a fin de reestablecer la convivencia y la gobernabilidad.
Miguel Barbosa Huerta afirmó que su gobierno acreditará que es diferente a los del pasado al estar a la altura de las necesidades y requerimientos de la sociedad poblana: “al toro por los cuernos en los temas de pobreza, en los temas de seguridad, en los temas de gobernabilidad”.
Y agregó: “vamos a hacer todo para que esa deuda social que no se les ha pagado a los pobres de Puebla podamos nosotros empezar a resolverla, sin colores, que los colores que antes fueron utilizados como marcas indelebles de un periodo que pensó que nunca iba a terminar hoy se contrasten con un gobierno sin colores, nuestros colores son los colores del alma de Puebla, los colores de la necesidad, de la pobreza”, finalizó.