Se trata de 32 mujeres, 13 niños y 4 hombres para completar las familias de los migrantes considerados como «más vulnerables».
El barco de rescate ‘Louise Michel’, financiado por el artista callejero Banksy, ha trasladado a los casi 200 migrantes que transportaba a otro barco de salvamento, el ‘Sea-Watch 4‘, después de que necesitara en las últimas horas de la intervención de la Guardia Costiera italiana para desalojar a parte de sus pasajeros por sobrecarga en cubierta.
«Acabamos de transferir a todos nuestros invitados al ‘Sea-Watch 4‘, que ahora lleva a 350 personas a bordo», ha explicado la tripulación del barco en su cuenta de Twitter. El ‘Sea-Watch 4‘ ya albergaba a unos 200 migrantes de una operación anterior.
Sin embargo, la situación todavía no se ha arreglado ya que ninguno de los dos barcos ha recibido permiso para desembarcar en puerto seguro. «Exigimos un Lugar de Seguridad para atracar. Ahora», ha añadido el ‘Louise Michel’, que ha confirmado que entre los migrantes hay un fallecido, muerto durante la operación inicial de rescate.
Este sábado el ‘Louise Michel’ había emitido una llamada de socorro por su incapacidad para navegar al estar sobrecargado con más de 200 personas salvadas en las últimas horas en el Mediterráneo Central, lo que llevo a la intervención de los guardacostas italianos para aliviar el peso en cubierta con la extracción de 49 migrantes.
Se trata de 32 mujeres, 13 niños y 4 hombres para completar las familias de los migrantes considerados como «más vulnerables», que fueron trasladados a bordo del barco de rescate oficial italiano; una lancha costera que ha partido desde el puerto de Lampedusa.
El ‘Louise Michel’ avistó el pasado viernes en la zona marítima de responsabilidad maltesa, un bote de goma que transportaba a unos 130 migrantes que decidió trasladar a bordo, y que se sumaron a varios que estaba trasladando.
Dado el peso en cubierta y al empeoramiento previsto de las condiciones meteorológicas marinas en la zona, el ‘Louise Michel’ se puso en contacto con el centro nacional de auxilio de la Guardia Costera de Roma, solicitando la intervención de activos navales para brindar asistencia.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y el Alto Comisionado para los Refugiados de Naciones Unidas (ACNUR) habían pedido horas antes pedido el desembarco inmediato de los más de 400 migrantes en el petrolero danés ‘Maersk Etienne’ y en los barcos de rescate ‘Louise Michel’ y ‘Sea-Watch 4′.
«El imperativo humanitario de salvar vidas no debe ser penalizado ni estigmatizado, especialmente en ausencia de esfuerzos dedicados dirigidos por el Estado», según han hecho saber ambas organizaciones en un comunicado conjunto.
«La falta de acuerdo sobre un mecanismo de desembarco regional, solicitado durante mucho tiempo por la OIM y ACNUR, no es una excusa para negarle a las personas vulnerables un puerto seguro y la asistencia que necesitan, como lo exige el derecho Internacional», añaden.