Mahsa Amini murió tras ser arrestada por la policía moral al presuntamente violar el código de vestimenta lo que desató protestas violentamente reprimidas
Choques violentos entre manifestantes y autoridades han dejado alrededor de 26 muertos en Irán durante las protestas por la muerte de la joven Mahsa Amini tras ser detenida por la policía.
Aunque no se podía determinar la magnitud de las protestas en una decena de ciudades y poblaciones, el movimiento representa el mayor malestar interno desde 2019, cuando defensores de los derechos civiles señalaron la muerte de de personas en la represión violenta.
El gobierno ha restringido el acceso a Internet y bloquearon los servicios de las aplicaciones WhatsApp e Instagram.
Un presentador de noticias de la televisión estatal dijo el jueves por la noche que 26 manifestantes y policías han muerto en las protestas que estallaron el sábado pasado tras el funeral de Amini, de 22 años, sin revelar cómo las autoridades calcularon esa cifra.
Al menos 11 personas han muerto, según un recuento de la agencia AP, basado en declaraciones de la prensa estatal y semioficial. Recientemente, el vicegobernador de Qazvin, Abolhasan Kabiri, dijo que un ciudadano y un oficial paramilitar murieron en las protestas.
Amini habitante de una ciudad kurda del noroeste, fue arrestada por la policía moral por presunta violación del estricto código de vestimenta; aunque la corporación dijo que murió a causa de un ataque al corazón y que no fue maltratada, su familia puso en duda esa versión.
Lo cierto es que los videos muestran a Amini en el momento del arresto, cubierta por un largo vestido negro y el velo islámico obligatorio.
Su muerte provocó condenas de los países occidentales y Naciones Unidas y agitó a la nación. Autoridades alegan que otros países no identificados y grupos de oposición fomentan el malestar.
En imágenes de las protestas, se aprecia a manifestantes en Teherán incendiando una patrulla y enfrentando a los agentes cuerpo a cuerpo. En otras partes de la capital, hubo disparos y una persona corría gritando “¡Están disparándole a la gente! ¡Dios mío, están matando gente!”.