La OPS ha enviado a todos los países de la región una guía sobre la importancia de priorizar vacunas contra la gripe o el sarampión.
En plena pandemia del coronavirus, la Organización Panamericana de la Salud alertó que no se baje la guardia con el sarampión, que está registrando “importantes” brotes en Brasil, Colombia y Venezuela.
Hablando en videoconferencia, la directora de la OPS, Carissa Etienne, urgió el martes a los países latinoamericanos a que mantengan como una prioridad la vacunación contra el sarampión porque la enfermedad podría resurgir y abrumar un sistema sanitario que tiene que lidiar con el coronavirus.
“Los esfuerzos para controlar el sarampión deben proseguir rápidamente en plena pandemia del COVID-19 o nos arriesgamos a borrar más de 20 años de progreso”, dijo Etienne.
La OPS informó la semana pasada en un comunicado que tres países latinoamericanos – Argentina, Brasil y México– están combatiendo brotes de sarampión al mismo tiempo que deben abordar los casos de COVID–19.
Desde septiembre de 2019 Argentina cursa el brote más importante de sarampión desde la eliminación de la circulación endémica de la enfermedad en el año 2000, registrándose hasta febrero de este año 120 casos confirmados en la capital y sus alrededores. El Ministerio de Salud registró recientemente el primer fallecido en el país por sarampión desde 1998, una mujer de 50 años.
Etienne destacó que el sarampión fue eliminado en la región latinoamericana en 2016. Sin embargo, se está disparando la alerta de nuevo a medida que el coronavirus interrumpe programas de inmunización de enfermedades prevenibles. El coronavirus también está provocando que menos personal sanitario se dedique a aplicar estas vacunas ya que ahora se encuentra batallando el COVID-19.
Por este motivo, Etienne dijo que la OPS ha enviado a todos los países de la región una guía sobre la importancia de priorizar vacunas contra la gripe o el sarampión.
“Si no inmunizamos ahora mucha más gente se contagiará de enfermedades prevenibles en los próximos meses y años”, dijo Etienne.
En América Latina hay más de 169.000 contagiados por coronavirus y casi 8 mil 400 muertos.
En México, de acuerdo con el último reporte de la Dirección General de Epidemiología de la Secretaría de Salud, hasta el pasado 24 de abril se habían detectado 154 casos de sarampión. Antes de eso, el último caso había ocurrido en 1994.
“El sarampión no se trata con medicamentos, sino con vacunas y México está preparado porque tiene un buen sistema de vigilancia epidemiológica además un buen programa nacional de vacunación”, dijo el subsecretario de salud, Hugo López-Gatell. “En este momento estamos haciendo esfuerzos para reforzar estos mecanismos de salud pública”.
En Bolivia se han reportado dos casos después de 20 años, uno cuatro días atrás en la región oriental de Santa Cruz y el otro en Sucre, por lo que el Ministerio de Salud y las autoridades sanitarias locales lanzaron una jornada de vacunación y están buscando a las personas que tuvieron contactos con los primeros casos.
“El primer caso es atípico porque pese a estar vacunada presentó signos y síntomas” relacionados con el sarampión como “fiebre, tos, rinorrea y manchas en la piel”, especificó el director nacional de Epidemiología, Virgilio Prieto.
En Venezuela, ninguna autoridad ha hecho comentarios sobre el brote de sarampión, ni han aportado cifras.
Por otro lado, el coronavirus ha infectado a más de tres millones de personas y causado la muerte a más de 213.000 en todo el mundo, según el Centro de Ciencias e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins, que basa sus datos en los informes de los gobiernos y las autoridades de salud de cada país.
En la mayoría de la gente este virus provoca síntomas leves o moderados que desaparecen en dos a tres semanas. Pero en algunas personas, sobre todo los adultos mayores y quienes padecen trastornos de salud subyacentes, puede causar enfermedades más graves e incluso la muerte.