La Universidad Brown ha retrasado las clases en persona al menos hasta el próximo mes.

Con el coronavirus propagándose en universidades a un ritmo alarmante, las autoridades escolares batallan para encontrar sitios de cuarentena en edificios de dormitorios y propiedades fuera del campus a fin de aislara los miles de estudiantes que han contraído COVID-19 o han estado expuestos a la enfermedad.

La Universidad Sagrado Corazón ha convertido una casa de huéspedes de 34 recámaras en la exsede de General Electric en Connecticut para cuarentena de alumnos.

La Universidad de Carolina del Sur se quedó sin espacio en un dormitorio para estudiantes en cuarentena y empezó a enviarlos a habitaciones que alquiló en instalaciones tipo hotel en un centro de capacitación para fiscales. La Academia de la Fuerza Aérea envió a 400 cadetes a hoteles a fin de liberar espacio en su base en Colorado para cuarentenas.

Las medidas nuevamente demuestran la manera en que el virus ha eliminado la vida tradicional en los campus en medio de una pandemia que hasta ahora ha causado la muerte a cerca de 200.000 personas en Estados Unidos y ha resultado particularmente problemática para las universidades desde el inicio del año escolar.

Muchas universidades rápidamente descartaron la enseñanza en persona a favor de clases en línea después que los casos empezaron a aumentar, los bares han estado cerrados en comunidades con vida universitaria y alumnos y hermandades estudiantiles han sido sancionados repetidamente por fiestas y reuniones numerosas.

Funcionarios sanitarios como la doctora Deborah Birx, que integra un grupo especial de la Casa Blanca para el combate al coronavirus, han estado exhortado a las universidades a impedir la presencia de estudiantes en sus campus para evitar que éstos contagien a su vez a sus familiares y comunidades.

En Sagrado Corazón, que adquirió un campus de GE de 26,7 hectáreas (66 acres) en 2016, la casa para visitantes, que llegó a ofrecer habitaciones para ejecutivos corporativos de visita, será usada por el resto del año para aislar a cualquiera de sus 3.000 estudiantes que dé positivo en COVID-19 y no pueda regresar a casa, informó Gary MacNamara, el director de seguridad pública de la escuela.

El aislamiento de estudiantes parece estar funcionando en estados como Connecticut, donde la tasa de contagios en la Universidad de Connecticut era de 1,34% el jueves entre los estudiantes en residencia sometidos a pruebas para el virus. Sin embargo, los resultados no han sido tan buenos en otras partes.

La Universidad de Alabama informó recientementea los estudiantes que viven en la mitad de un complejo de cinco niveles que deberán mudarse a otras zonas habitacionales para crear espacio a alumnos contagiados o potencialmente contagiados, debido a que otras dos instalaciones para cuarentena y aislamiento están cerca de llegar a su máxima capacidad.

Hasta ahora, más de 1.000 de su campus en Tuscaloosa han dado positivo en COVID-19 desde mediados de agosto. Hasta el jueves, la pantalla en línea del sistema universitario mostraba que sus instalaciones de cuarentena se hallaban ocupadas en un 36%.

La Universidad de Carolina del Sur tiene aproximadamente 35.000 estudiantes en su campus principal en Columbia. Más de 1.400 de ellos han dado positivo en coronavirus hasta el momento, y muchos más han recibido la orden de cumplir una cuarentena después de tener contacto con otros alumnos confirmados con COVID-19.

La Universidad Brown ha retrasado las clases en persona al menos hasta el próximo mes debido a preocupaciones sobre espacios que asignaría a quienes dieran positivo en coronavirus.

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