El Papa Francisco ha canonizado al sacerdote Manuel Ruiz López y a siete compañeros de la Orden de los Frailes Menores, junto con tres laicos maronitas, hermanos entre sí: Francisco, Mooti y Raphael Massabki, en una ceremonia celebrada en la plaza de San Pedro.
Como es costumbre, Francisco I utilizó una fórmula en latín para declarar su santidad y solicitó que fueran inscritos en los libros de los santos de la Iglesia.
Continuamos la obra de Jesús en el mundo. Bajo esta luz podemos recordar a los discípulos del Evangelio que son hoy canonizados. A lo largo de la agitada historia de la humanidad ellos fueron siervos fieles, hombres y mujeres que sirvieron en el martirio y la alegría, como el hermano Manuel Ruiz López y sus compañeros», ha dicho el Papa en la ceremonia de canonización a la que ha acudido el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, quien se reunió con el Papa en el Vaticano en junio del 2022, además de la embajadora española ante la Santa Sede, Isabel Celaá.
Todos fueron asesinados por odio a la fe en Damasco (Siria) entre el 9 y el 10 de julio de 1860, en una época de terrible persecución contra los cristianos por parte de los drusos chiitas. Los restos mortales de estos once mártires -que pudieron ser recuperados tras la masacre- se conservan en la capilla de la iglesia latina dedicada a san Pablo en pleno centro de Damasco.
En la ceremonia solemne de este 20 de octubre, Francisco ha canonizado también al italiano Giuseppe Allamano, que en 1901 fundó el Instituto de los Misioneros de Consolata, a partir del santuario mariano de Turín del que era rector, dedicado a Nuestra Señora de la Consolata. Pío XII le pidió que creara también una sección femenina: las Hermanas Misioneras de la Consolata.
Asimismo, ha proclamado santas a la italiana Elena Guerra, fundadora de la Congregación de Oblatas del Espíritu Santo, conocidas también como las hermanas de santa Zita; y a la canadiense Marie-Léonie Paradis (nacida Virginie Alodie), fundadora de la Congregación de las Hermanitas de la Sagrada Familia.
En su homilía, el Papa Francisco ha recordado que los nuevos santos vivieron como Jesús, buscando el servicio y no el poder o el reconocimiento. «La fe y el apostolado que llevaron a cabo no alimentaron en ellos deseos mundanos ni ansias de poder sino que, por el contrario, se hicieron servidores de sus hermanos, creativos para hacer el bien, firmes en las dificultades, generosos hasta el final», ha dicho. Ha insistido además en que «el servicio es el estilo de vida cristiano».
Por otro lado, durante el rezo del ángelus, el Papa ha recordado que este domingo se celebra el DOMUND y ha invitado a sostener a los misioneros «que muchas veces, con gran sacrificio, llevan el anuncio del Evangelio a cada rincón de la tierra». Por último, ha pedido una vez más la paz en «la martirizada Palestina, Israel, Líbano, la martirizada Ucrania, Sudán, Myanmar».
Con información de Infobae.
Sigue la información de última hora en las redes sociales de URBANO Noticias Puebla y Tlaxcala.