Durante el hallazgo del pasadizo subterráneo se decomisaron cocaína, metanfetamina y heroína.
Autoridades de Estados Unidos descubrieron un narcotúnel que va desde Tijuana, México, hasta un depósito en Otay Mesa, San Diego.
El pasadizo subterráneo tiene alrededor de 532 metros de largo, 19 metros de profundidad y metro y medio de diámetro.
Fue construido con paredes reforzadas, un sistema de rieles, electricidad y un sistema de ventilación.
El hallazgo del narcotúnel derivó de la vigilancia de un domicilio que se usaba como escondite para el contrabando de drogas.
Seis personas fueron detenidas por conspiración para distribuir cocaína.
Los imputados son: Mario Jaramillo de Huntington Beach; Adrián Enríquez de Perris, California; Juan Cruz de San Ysidro; y Vanessa Ramírez, Luz de Luna Olmos y Manuel Pérez de San Diego.
Durante el hallazgo del pasadizo subterráneo se decomisaron cocaína, metanfetamina y heroína.
En el caso de Olmos y Ramírez también se les imputa conspiración para distribuir metanfetamina y para distribuir heroína.
