El líder empresarial Gustavo de Hoyos anunció su intención de convertirse en candidato presidencial.
Su destape fue a través de un conjunto de videos que publicó en Twitter y donde propone una plataforma política inicial que incluye la pena de muerte y la mano dura al estilo Nayib Bukele.
“Es tiempo de acabar con los feminicidios y los violadores y con las parejas violentas, que nuestras hijas, esposas y madres caminen sin miedo. (Usar) con la misma fuerza que se está usando en El Salvador para acabar con las maras”, dijo.
En los materiales audiovisuales dijo que está dispuesto a “encabezar el esfuerzo” de tomar las riendas del país ya que los políticos tienen a los mexicanos “hasta la madre”.
Se dijo listo para convertirse en candidato presidencial de la oposición, dijo que recorrerá el país y que propondrá imponer pena de muerte y cadena perpetua para diversos delitos.
“Soy Gustavo de Hoyos, orgullosamente norteño y fronterizo, no vivo de la política y así como en mis negocios y mi vida privada, me gusta ser claro y directo: ¡Yo estoy listo y me apunto! Yo quiero encabezar ese esfuerzo”.
Agregó que los políticos tienen otras prioridades que no tienen nada que ver con las necesidades de la ciudadanía. Propuso “que haya “servicios de salud y educación de calidad para todos los mexicanos: que tú puedas elegir escuela o clínica pública o privada, la que necesites, pagada por el gobierno. Hoy tus impuestos se gastan en puros caprichos”, dijo también.
“¿Qué pasaría si uno de nosotros se levanta para tomar las riendas de este país? Alguien que sienta lo mismo que nosotros. A mí me preocupa mi familia, mi trabajo y mi país… tengo la misma sangre que tú, alguien que no está podrido del poder”.
Propuso “combatir a la delincuencia de manera radical para recuperar la tranquilidad de nuestras familias: tenemos que evaluar todas las opciones, incluida la pena de muerte, la cadena perpetua y la extradición automática y desde luego la cooperación total entre nosotros y los americanos (sic)”, dijo.
Añadió que como presidente, él se sentaría a negociar con Biden y “no con la mamá del Chapo”.