Tras salir de la Ciudad de México, los migrantes centroamericanos tuvieron que caminar más de 200 kilómetros para llegar a Querétaro.
Con una oración, aplausos y algunas porras, despertaron esta mañana los migrantes centroamericanos de la segunda caravana en el estadio Corregidora en Querétaro para salir al estado de Guanajuato.
En un clima muy frío, pues la temperatura estaba a 6.0 grados Celsius, los migrantes que en su mayoría portan chamarras con gorros, decidieron que las 06:00 horas era el horario adecuado para retomar su camino hacia Estados Unidos.
Se trata de un grupo de entre 600 y 700 personas, pues aún no arriba el resto de la caravana que habría estado integrada por más de mil 200.
Los migrantes han señalado que la dificultad después de salir de la Ciudad de México había sido el caminar más de 200 kilómetros para llegar a Querétaro, por lo que han esperado hasta más de tres horas para que algún mexicano les brinde apoyo con “aventones”.
Al salir el sol y hasta cerca de las 08:00 de la mañana, los migrantes continuaron su travesía, donde tomaron la carretera para pedir “aventones” que los lleven a Celaya e Irapuato en Guanajuato.
En tanto, personal del gobierno del estado y de la Policía Estatal custodian a al contingente hasta su salida de Querétaro.