Existe rezago en la atención de expedientes; hay movimientos financieros poco claros y designación de personal sin acreditar requisitos
La presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), Jakqueline Ordóñez Brasdefer solicitó al Órgano de Fiscalización Superior (OFS) y a un despacho externo con representación en las Ciudades México y Puebla, la aplicación de auditorías operacional, administrativa y financiera del presente ejercicio fiscal para que exista un diagnóstico sobre las condiciones en las que inicia su labor, además de transparentar la aplicación de los recursos públicos y la labor del organismo autónomo.
En entrevista, a unos días de asumir el cargo, Ordóñez Brasdefer explicó que el proceso de entrega recepción fue retomado y está avanzando desde el día lunes cuando se instalaron las comisiones de revisión con el comisionado del expresidente del exombudsperson, Víctor Manuel Del Prado Pineda y la administración entrante ante el Órgano de Fiscalización Superior (OFS).
Dijo que este procedimiento llevará tiempo, no obstante solicitó al OFS la aplicación de una auditoría financiera a lo que va del ejercicio fiscal que corresponde a la administración de Cid Del Prado, con el objetivo de aclarar algunos movimientos financieros que son poco claros con respecto al manejo de recursos tanto financieros como humanos, en este último aspecto que tienen que ver nombramientos y despidos de personal.
En ese sentido Brasdefer mencionó “he solicitado al OFS una auditoría del periodo del 1 de enero al 17 de junio del 2021 en la que se podrán observar todas las inconsistencias porque hay cosas que apreciamos a simple vista, no soy contadora, pero si hay anomalías y creo necesario que personal del órgano haga la auditoría correspondiente y en su caso si resulta responsabilidad se va a denunciar penalmente”.
Pero además, realizará una auditoria externa a través de un despacho jurídico, especialista en derechos humanos, para analizar también el área operacional de la CEDH para detectar rezagos en el cumplimiento de las funciones del organismo autónomo, el estado que guardan los expedientes de casos, así como la detección de omisiones, manejo de libros de gobierno, informes e identificar con ellos áreas de oportunidad.
En ese sentido adelantó que mañana el despacho externo para garantizar que no habrá conflicto de intereses en la revisión de la información tampoco que sea subjetivo, con el cual estarán como observadores los integrantes del Consejo Consultivo.
“Lo que quiero es un diagnóstico de cómo está funcionando la CEDH. Ahora veo que si hay un rezago se dejó de dar un flujo constante en la tramitación de quejas de calificativas y de más con la justificante de este proceso de transición entonces ahora se acumuló el trabajo y debemos recuperarlo”, agregó que el atraso corresponde a expedientes de los años 2019, 2020 y 2021 pero el ejercicio es también para saber si hay de años anteriores y las razones de por qué no se resolvieron.
Ordóñez Brasdefer comentó que la próxima semana ya tendrá un panorama más completo del estado que guarda la comisión, presentar las denuncias correspondientes a las que haya lugar, continuar con la defensa de los derechos humanos, y empezar con programas en materia de prevención de derechos humanos.
