Fue militante por 14 años y ocupaba una secretaría dentro del partido.


Con menos de un mes al frente del Comité Directivo Estatal (CDE) del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el líder Néstor Camarillo Medina, tuvo su primera baja del partido, luego de que Marisol Calva García, renunció a la militancia y dejó la Secretaria de Vinculación con Instituciones Educativas.

Así lo confirmó la propia ex diputada local del PRI en las elecciones de 2018, luego de señalar que el partido ya no representa los ideales que la motivaron trabajar por Puebla desde hace 14 años.

Sentenció que los actuales partidos políticos han perdido la credibilidad de la población, que por eso renunció a las filas del partido e impulsará proyectos políticos de cara al 2021, cuando habrá nuevas votaciones.

Aunque no especificó si se sumará a otro instituto político, señaló que Puebla necesita de un cambio generacional, donde se incentive a la población volver a creer en los proyectos políticos que modifiquen sus condiciones de vida.

“La única alternativa que tenemos es construir equipos sólidos y fuertes para sacar adelante a Puebla y a México, lamentablemente he dejado de encontrar esa visión en el PRI.

Soy una mujer que cree en la lealtad y los valores que me ha inculcado mi familia. Pertenezco a una generación que avanza con ideas alejándose de la sumisión para ocupar la silla”.