Debido a la situación, se terminó la sesión pese a los 19 puntos que se tenían en el orden del día, entre ellos la aprobación para que los PPS se consideren deuda publica.
Esta tarde los diputados de oposición en el Congreso del Estado de Puebla tomaron la tribuna para exigir que el presidente de la Mesa Directiva, José Juan Espinosa Torres respete el reglamento durante las sesiones.
Fueron los integrantes del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN) quienes iniciaron la revuelta y a la que se sumaron los del Revolucionario Institucional (PRI).
Espinosa Torres, primero interrumpió a la diputada del PAN, Monica Rodríguez durante sus intervenciones, y después evitó que el legislador del PRI, Javier Casique Zarate usará la tribuna legislativa. Todo esto, molestó a los diputados.
Truena revuelta en el @CongresoPue
Diputados de @PANPUEBLA y @PRIdePUEBLA revientan sesión para exigir a @JoseJuanEsp, presidente de la Mesa Directiva, respete el reglamento.
? @chucho_lemus1 pic.twitter.com/tyg67JdHDj
— URBANO (@urbano_noticias) 14 de noviembre de 2018
El reconocimiento de los Proyectos para la Prestación de Servicios (PPS) como deuda pública y pedir que el viejo edificio del Ex Hospicio sea donado a la BUAP, evidenciaron la deficiencia legislativa de los diputados que acabaron reventando la sesión ordinaria de este miércoles.
El conflicto inició por la discusión de los PPS, donde el diputado local del Partido del Trabajo (PT), José Juan Espinos Torres, empezó a enlistar las obras ejecutadas bajo este esquema, entre ellas, dijo, “el pinche tren turístico” que va de Puebla a Cholula.
Tras hora y media de discusión, el tema de PPS fue aprobado con 22 votos a favor, 14 en contra y 3 abstenciones, pero la confrontación subió de nivel convirtiendo la sede del Poder Legislativo en un ring político, donde se pidió al gobierno donar el edificio del Ex Hospicio a la BUAP.
Enfrascados en la discusión, la diputada local del Partido Acción Nacional (PAN), Mónica Rodríguez, usó la tribuna para condenar que José Juan Espinosa Torres sea un misógino, quien no la dejaba hablar en tribuna, además de criticar que usara groserías en la discusión de temas.
Fie al su estilo y con el colmillo político que se caracteriza, Espinosa Torres se mofó de Mónica Rodríguez, argumentó que la palabra “pinche, según el diccionario, es ayudante de cocinero”, por lo tanto, no representa ninguna grosería.
Segundos más tarde, el diputado local del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Javier Casique Zarate, quiso usar la tribuna parlamentaria para seguir debatiendo el tema del Ex Hospicio, pero una vez más José Juan Espinosa Torres se impuso y no dejó al priista usar la tribuna legislativa. Ello detonó el enojo de los diputados locales del PRI y PAN que unieron fuerzas para evitar que el legislador del PT, José Juan Espinosa Torres, siguiera con la sesión del Congreso del Estado.
Sin embargo el petista minimizó la rebelión del PRI y PAN, que intentó seguir con la sesión, pero el diputado panista, Marcelo García Almaguer le apagó el micrófono, mientras que su compañero de Nueva Alianza, Gerardo Islas, desconectó el mismo.
La tensión entre los grupos subió de nivel, que por unos minutos se interpretó que habría golpes entre algunos personajes, pero solo hubo rechiflas y reclamos, principalmente hacia Gabriel Biestro Medinilla, quien a pesar de ser el presidente del Congreso de Puebla, no puso orden a la sesión.
Tras varios minutos, el presidente de la Mesa Directiva, José Juan Espinosa Torres sometió a votación el asunto de la donación del predio para la BUAP y tras no controlar más la sesión, decidió concluir la misma provocando más rechiflas y mentadas de madre hacia su persona.
