Un estudio de la Complutense calculaba que sólo la reducción de 5 horas semanales de la jornada implicaría 560 mil nuevos empleos
La empresa andaluza pionera en instaurar la semana de 4 días laborales en España hace año y medio presume de resultados. Más productividad y mejor relación con los trabajadores. Todos ganan con esta revolución laboral que podría, al fin, beneficiar a empresarios y a trabajadores. La gran Telefónica ya está implantando esta jornada piloto.
«Por el momento, solo nos ha reportado cosas buenas», cuenta a Sputnik Ana Arroyo, la responsable de Recursos Humanos de Software DelSol, la primera empresa en España en instalar la reducción para toda su plantilla el primer día de 2020. «Tras un periodo de transición y adaptación estamos contentos, nuestros clientes no han visto ninguna alteración en su servicio, de hecho, hemos mejorado en las encuestas de satisfacción que hacemos», explica la responsable desde Mengíbar (Jaén).
Y DelSol, a pesar del cambio y tras pasar la incertidumbre del año pandémico, ha aumentado en un 20% su facturación. Pero, ¿cómo ha afectado al personal el hecho de trabajar un día menos a la semana y cobrar lo mismo? «Hemos reducido en un 28% el absentismo laboral, hay una mejor relación de fidelidad entre trabajador y empresa y eso, para nuestros clientes, se traduce en que tienen un contacto más personalizado también».
«Para mí, ha sido un cambio de vida total», confiesa Pedro Cortés, de 37 años y empleado desde hace cuatro años en la empresa. Sus fines de semana se han alargado sin perder dinero y eso se ha traducido en más calidad de vida. «En el trabajo rinde más, no hay cansancio y por eso estás más clarividente. A nivel personal, cuidas más de los tuyos con más tiempo y a ti mismo».
Pero ¿qué escenario afrontaremos si trabajamos cuatro días? Si la tradición habla de trabajadores de cuello blanco (oficinistas) frente a los de mono azul (servicios), podríamos empezar a hablar de un mundo de fin de semana largo y otro de horas interminables. Las pymes y sector servicios ven el plan–Errejón como una utopía.
Un estudio de la compañía de recursos humanos Adecco y el Instituto Cuatrecasas revela que un 74% de las 500 empresas encuestadas ven imposible la reducción. «Si en los 80 pasamos de 6 días a 5 días, ¿por qué ahora no se podría hacer? Consideramos que esta modificación reportaría importantes beneficios, en cuanto al reparto del trabajo, la conciliación de la vida laboral, personal y familiar», reivindica Carrasco, de CCOO.
En la balanza positiva hacia el cambio, un estudio de la Complutense calculaba que sólo la reducción de 5 horas semanales de la jornada implicaría 560.000 nuevos empleos, un 2,6% menos de desempleo (en los cálculos de enero 2021).
Telefónica protagoniza por el momento el paso más importante en España en la revolución de los cuatro días, apuntándose al plan piloto. Propone a sus trabajadores una Jornada Semanal Flexible Bonificada (JSFB), una reducción a 32 horas/semana, pero con una reducción de salario, algo que no cuenta con respaldo social.
F. Sputnik