En Francia también se había dado la recomendación de dar una sola dosis de vacunas para el COVID-19 a los que ya habían estado contagiados.
Vacunarse es una de las varias medidas que sirven para protegerse y proteger a otras personas del COVID-19. En menos de un año de la declaración de pandemia por la Organización Mundial de la Salud ya se demostró que varias vacunas son eficaces y seguras para la prevención de la infección por el coronavirus.
Para que varias de esas vacunas tengan el efecto esperado, se requieren dos dosis según los ensayos clínicos. Pero la investigación científica siguió y un nuevo estudio realizado en los Estados Unidos aportó más pruebas que demuestran que las personas que ya habían tenido el coronavirus antes de la vacunación logran protección solo con una dosis.
A comienzos de marzo, se había difundido un informe técnico con la vacuna Sputnik V en la Argentina con resultados en la misma dirección. En febrero, en Francia también se había dado la recomendación de dar una sola dosis de vacunas para el COVID-19 a los que ya habían estado contagiados.
El nuevo estudio fue realizado por los equipos de la microbióloga alemana Viviana Simon, que trabaja en la Escuela Icahn de Medicina de Mount Sinaí, en los Estados Unidos, junto con el grupo de Florian Krammer. Contaron con financiamiento del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas y Alergia, organizaciones filantrópicas y donaciones particulares para hacer el trabajo que fue publicado en la revista The New England Journal of Medicine
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En el estudio participaron 110 personas que recibieron las vacunas contra el COVID-19 de Pfizer-BioNTech y Moderna que requieren dos dosis y ya habían demostrado alta eficacia en la prevención de la infección en personas sin antecedentes de enfermedad. “Nos preguntamos cuál sería la respuesta a la primera dosis de la vacuna en personas con COVID-19 previa”, contaron los investigadores en el paper. Quisieron saber si el nivel de los anticuerpos en 110 participantes era diferente si ya había tenido o no la infección.
Encontraron que el grupo que ya había tenido la infección desarrolló anticuerpos dentro de los días de la primera dosis de la vacuna a una tasa de 10 a 20 veces más alta que aquellos que no estaban infectados. Con la segunda dosis, la tasa de protección fue más de 10 veces mayor en los que ya se habían contagiado antes de la vacunación en comparación con los que no se habían contagiado.
En la Argentina, se difundieron los resultados de un trabajo realizado por investigadores de la Fundación Instituto Leloir y el Conicet. Se enfocó en la vacuna Sputnik V, desarrollada por el Instituto Gamaleya en Rusia, que se aplica en dos dosis para alcanzar una protección adecuada ante la infección del coronavirus.
El trabajo se hizo con personal de la salud de hospitales públicos de la provincia de Buenos Aires, y demostró por primera vez que con solo una dosis de la Sputnik V ya se alcanza esa protección en las personas que habían tenido el coronavirus antes de la inmunización. El trabajo fue difundido por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación. En el comunicado oficial sobre el trabajo, se sostuvo que los datos obtenidos en el estudio “sugieren revisar el esquema de vacunación para aquellos individuos que ya estuvieron expuestos a SARS-CoV-2”.
Sin embargo, desde la cartera de Salud, a través de Presidencia de la Nación se aclaró el mismo día que se trata sólo de “un informe técnico. Muy importante desde el punto de vista científico. No está bajo evaluación en el Ministerio de Salud de la Nación no dar la segunda dosis de Sputnik V a las personas que tuvieron COVID-19”.
El estudio se hizo en 142 trabajadores de la salud que se ofrecieron como voluntarios de siete centros públicos de la Provincia de Buenos Aires, de los cuales 22 habían estado previamente infectados con el nuevo coronavirus. Tienen entre 18 y 59 años.
Según contó Infobae, Jorge Geffner, investigador del Conicet en inmunología y uno de los que realizó el trabajo sobre Sputnik V, “primero, se tomó una muestra de sangre de los voluntarios para medir los anticuerpos antes de que recibieran la vacuna Sputnik V. Esto se hizo para saber si ya habían estado infectados por el coronavirus. Luego se aplicó la primera dosis de la vacuna. Al día 21, se les sacó una muestra de sangre para ver el nivel de anticuerpos que ya habían desarrollado”.
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