Ahora los asaltantes ya no se conforman con las ganancias del día, pues han decidió atentar contra de la vida de los operadores, refieren transportistas
El sector del transporte está preocupado, después del asesinato de un militar retirado por tratar de evitar que se robaran una camioneta del transporte público en Tizatlán, comunidad del municipio de Tlaxcala.
Pues los asaltos han pasado de ser amenazas a hechos violentos que generan decesos con arma de fuego con revolver de alto calibre.
Además refieren que ahora no basta con despojarlos de las unidades o las ganancias del día, si no que los agreden o en el peor de los casos los privan de la vida con tal de cometer su objetivo.
Hugo Salado del Razo, integrante de esta agrupación de transportistas, manifestó que ha sido lento el avance para concretar las acciones que anunció el gobierno estatal, para reforzar la seguridad y modernizar el transporte público.
“Es lamentable que se hagan planteamientos como instalación de cámaras, entrar a una etapa de las plataformas para mejorar el servicio, todo eso requiere de estudios, contratación de empresas y sobre todo capital económico”, refirió.
