Andrea Lezama, vocera en Puebla de la colectiva de Madres Amorosas Contra la Violencia Vicaria Cam-Cai, solicitó al Poder Judicial que no liberen a Ricardo «N», su expareja y padre de su hijo. Dijo que su vida estaría en riesgo o el hombre nuevamente sustraería a su menor hijo, que no estuvo con ella por más de 6 años.
En entrevista afuera de Casa de Justicia, donde se realizó una audiencia intermedia, acusó que la Ministerio Público titular de la mesa de litigación 5 de la Unidad de Investigación de Delitos Contra la Familia de la Fiscalía de Investigación de Delitos Contra las Mujeres, Fabiola Romero Aguirre, la hostiga para que otorgue el perdón a su agresor.
Solicitó al titular de la Fiscalía General del Estado (FGE), Gilberto Higuera Bernal, que llame la atención de la funcionaria referida. También pidió medidas de protección para ella y su hijo, ya que se las retiraron recientemente.
También urgió a la magistrada presidenta del Poder Judicial del Estado, Margarita Gayosso Ponce, garantizar la aplicación de la ley a favor de ella y de su hijo. Quiere que se garantice el acceso a la justicia.
«Sancionar la violencia vicaria es la esperanza de miles de madres que luchamos por estar nuevamente con nuestras hijas e hijos sustraídos por sus padres», dijo.
Tras una larga lucha, el pasado 20 de octubre de 2022, aprehendieron a Ricardo «N» en Baja California Sur. El menor Héctor ingresó al sistema DIF y posteriormente se le entregó a su madre, luego de que el padre lo sustrajo cuando tenía año y medio.
Ricardo «N» es el primer agresor vicario vinculado a proceso por violencia familiar. Cuenta con la agravante de violencia vicaria a nivel Latinoamérica.
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