Otro problema es el congestionamiento o tiempos de espera elevado aumentan la posibilidad de un hecho de tránsito.
Es necesario adecuar las casetas de cobro para evitar accidentes fatales como el del pasado sábado 6 de noviembre que un solo hecho de tránsito arrojó un saldo terrible de 19 personas fallecidas mientras esperaban el cruce en la “caseta de cobro San Marcos”, después de ser embestidos por un vehículo de grandes dimensiones, al parecer atribuible a una falla mecánica.
A decir de Anuar Musalem Valencia, subdirector del capítulo Puebla de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM) el problema es mayúsculo ya que tan solo por esa caseta (San Marcos) se realizan 64 mil 698 cruces diarios, es decir casi la población total de una ciudad media del país.
“Este lamentable evento nos obliga a realizar consideraciones de seguridad vial adicional en las casetas o plazas de cobro”, explicó Musalem Valencia.
Y es que de acuerdo al estudio denominado “Adecuación a casetas de cobro para evitar accidentes” realizado por la AMTM, un vehículo de grandes dimensiones representa un riesgo elevado de al interactuar con un vehículo pequeño.
El reporte detalla que la movilidad es una democracia, “así como hablamos de ciclistas y peatones siendo vulnerables a los automotores, ahora debemos aceptar que la interrelación de un vehículo familiar con uno de grandes dimensiones lleva un riesgo elevado”.
Anuar Musalem señala que “nadie sabe con exactitud que transporta el vehículo contiguo”.
“Tu puedes conducir en la avenida Reforma, o dentro de cualquier calle de tu municipio y conviviendo con vehículos de baja capacidad que trasladan solventes, acetona, o cualquier líquido inflamable; si consideramos la posibilidad de sufrir un hecho de tránsito en trazo urbano, podría verse involucrado un vehículo con este tipo de carga” detalló.
Otro problema es el congestionamiento o tiempos de espera elevado aumentan la posibilidad de un hecho de tránsito.
Por cada automóvil con retraso se pueden generar colas de espera de hasta 150 metros a razón del aforo por carril por sentido, (causas: impericia en cajero, pago con billete de alta denominación, falta de atingencia del conductor en la apertura de ventanillas, y presencia de vendedores ambulantes), la espera, nos vuelve vulnerables a fallas mecánicas, detalla el estudio.
Lo anterior es un caldo de cultivo para otra tragedia.
Propuestas de solución
1. Horarios de operación nocturno o los que estime la autoridad con base a volumen vehicular, para vehículos de grandes capacidades, ejemplo: de 23.59 horas a 6 horas.
2. Separar o disgregar los flujos vehiculares, carriles o calles exclusivas para la operación de vehículos de grandes dimensiones o de aquellos que transporten sustancias peligrosas.
3. Identificación vehicular clara, con base a rotulación homologada, garantizando el tipo de sustancia y su manejo.
4. Implementar tecnología asequible, el único elemento de cobro anticipado que ha demostrado su rentabilidad es la tarjeta de prepago o equivalente, ahorra tiempo de cobro en cajero, disminuye la posibilidad de comprar a vendedores ambulantes y evita pérdida de tiempo en búsqueda por conductor.
5. Garantizar la seguridad de los transportistas, el transporte mercantil mueve a nuestro país, se requieren horarios adecuados o en su defecto: seguros, impidiendo los asaltos.
Tanto los códigos municipales reglamentarios, los reglamentos de tránsito o vialidad consideran horarios para la operación de vehículos de grandes dimensiones, inclusive CAPUFE con las NOM-040-SCT-2-2012 y NOM-012-SCT-2-1995, solo necesitamos que la autoridad lo haga valer, concluye el análisis.
