Estos síntomas, sin embargo, aparecen más temprano en unas personas que en otras.
A los 65 años, el promedio de la población mundial comienza a desarrollar una gran cantidad de dolencias relacionadas con la vejez.
Estos síntomas, sin embargo, aparecen más temprano en unas personas que en otras.
Problemas de salud como la pérdida de audición, los ataques cardíacos, las lesiones por caídas y las enfermedades neurodegenerativas, pueden manifestarse a edades muy diferentes, según el lugar donde viva la persona.
La diferencia entre aquellos que «envejecen bien» y aquellos que «envejecen temprano» puede ser de hasta tres décadas o más.
Así, por ejemplo, una persona de 45 años en Papúa Nueva Guinea se siente tan vieja como alguien de 75 años en Francia o Singapur.